Pruebas de ADN demuestran que una pareja de gitanos búlgaros son los padres del “Ángel rubio”
SOFÍA, AFP
Análisis de ADN confirmaron que Sacha y Atanas Roussev, una pareja de gitanos de Bulgaria, son los padres de la pequeña María, descubierta por la policía en un campo de gitanos en Grecia, indicó el viernes un responsable del ministerio del Interior.
“Las pruebas de ADN demostraron que Sacha Roussev es la madre biológica y que Atanas Roussev es el padre biológico de la niña llamada María”, apodada por los medios “El ángel rubio”, explicó a la prensa Svetlozar Lazarov, secretario general del ministerio del Interior encargado de la comunicación.
Análisis de ADN confirmaron que Sacha y Atanas Roussev, una pareja de gitanos de Bulgaria, son los padres de la pequeña María, descubierta por la policía en un campo de gitanos en Grecia, indicó el viernes un responsable del ministerio del Interior.
“Las pruebas de ADN demostraron que Sacha Roussev es la madre biológica y que Atanas Roussev es el padre biológico de la niña llamada María”, apodada por los medios “El ángel rubio”, explicó a la prensa Svetlozar Lazarov, secretario general del ministerio del Interior encargado de la comunicación.
María, cuya edad ha sido estimada en entre cuatro a seis años, será ahora acogida en un centro de asistencia social en Bulgaria, y luego colocada en una familia búlgara, indicó Yana Kaneva, responsable de la Dirección regional de los servicios sociales en Stara Zagora a la agencia de prensa búlgara BGNES.
La pequeña fue descubierta el 16 de octubre durante un registro de rutina de la policía en un campo de gitanos de Farsala, cerca de Larissa en Grecia.
La foto de la niña rubia ha dado la vuelta al mundo, y la pareja de gitanos que se hacían pasar por sus padres fue inculpada de secuestro por un tribunal griego, que decretó la detención preventiva.
La pareja, un hombre de 53 años y una mujer de 48, declaró a la policía que la niña les fue confiada por una gitana búlgara, cuando tenía apenas unas semanas de nacida, porque no podía criarla.
Según las autoridades griegas, la niña podría haber sido vendida por unos 200 euros.