Detienen a cuatro policías egipcios por la muerte de 37 partidarios de Mursi
Madrid, EP
Cuatro agentes de Policía egipcios han sido detenidos este martes en relación con la muerte de 37 partidarios del derrocado presidente Mohamed Mursi que perdieron la vida el pasado mes de agosto durante su traslado a la prisión de Abu Zabaal, según ha informado el diario estatal 'Al Ahram'.
Las detenciones se han llevado a cabo a petición del fiscal del Estado, Hisham Barakat, y los agentes permanecerán cuatro días en prisión preventiva a la espera de que comience el proceso que se ha abierto en su contra por los cargos de negligencia y homicidio.
El pasado 18 de agosto, el Ministerio del Interior confirmó que 37 partidarios de Mursi habían muerto asfixiados por gases lacrimógenos y por hacinamiento mientras eran trasladados al penal de Abu Zabaal, en El Cairo. No obstante, tanto la prensa como fuentes de seguridad han asegurado que en el incidente murieron un total de 49 detenidos.
Las fuerzas de seguridad se defendieron de cualquier acusación argumentando que habían fallecido durante un intento de fuga, pero los investigadores de la Fiscalía determinaron posteriormente que no se había producido tal intento.
'Al Ahram' ha recordado que la Policía egipcia ha sido acusada en numerosas ocasiones de uso excesivo de la fuerza y de torturas. De hecho, las movilizaciones de enero de 2011 que pusieron fin al largo régimen de Hosni Mubarak comenzaron con una protesta contra la brutalidad policial.
Los Hermanos Musulmanes, el movimiento al que pertenece Mursi, han acusado a las autoridades egipcias de graves violaciones de Derechos Humanos desde que el expresidente fuera derrocado el pasado 3 de julio mediante un golpe de Estado militar. El Gobierno ha rechazado estas acusaciones y ha acusado a los Hermanos Musulmanes de ser un grupo terrorista que aspira a desestabilizar el país.
Cientos de islamistas han muerto y cerca de otros 2.000 han sido detenidos --incluidos Mursi y otros altos dirigentes de Hermanos Musulmanes-- a causa de la represión de las fuerzas de seguridad desde el golpe de Estado.
Cuatro agentes de Policía egipcios han sido detenidos este martes en relación con la muerte de 37 partidarios del derrocado presidente Mohamed Mursi que perdieron la vida el pasado mes de agosto durante su traslado a la prisión de Abu Zabaal, según ha informado el diario estatal 'Al Ahram'.
Las detenciones se han llevado a cabo a petición del fiscal del Estado, Hisham Barakat, y los agentes permanecerán cuatro días en prisión preventiva a la espera de que comience el proceso que se ha abierto en su contra por los cargos de negligencia y homicidio.
El pasado 18 de agosto, el Ministerio del Interior confirmó que 37 partidarios de Mursi habían muerto asfixiados por gases lacrimógenos y por hacinamiento mientras eran trasladados al penal de Abu Zabaal, en El Cairo. No obstante, tanto la prensa como fuentes de seguridad han asegurado que en el incidente murieron un total de 49 detenidos.
Las fuerzas de seguridad se defendieron de cualquier acusación argumentando que habían fallecido durante un intento de fuga, pero los investigadores de la Fiscalía determinaron posteriormente que no se había producido tal intento.
'Al Ahram' ha recordado que la Policía egipcia ha sido acusada en numerosas ocasiones de uso excesivo de la fuerza y de torturas. De hecho, las movilizaciones de enero de 2011 que pusieron fin al largo régimen de Hosni Mubarak comenzaron con una protesta contra la brutalidad policial.
Los Hermanos Musulmanes, el movimiento al que pertenece Mursi, han acusado a las autoridades egipcias de graves violaciones de Derechos Humanos desde que el expresidente fuera derrocado el pasado 3 de julio mediante un golpe de Estado militar. El Gobierno ha rechazado estas acusaciones y ha acusado a los Hermanos Musulmanes de ser un grupo terrorista que aspira a desestabilizar el país.
Cientos de islamistas han muerto y cerca de otros 2.000 han sido detenidos --incluidos Mursi y otros altos dirigentes de Hermanos Musulmanes-- a causa de la represión de las fuerzas de seguridad desde el golpe de Estado.