Avances y retrocesos en los 31 años de democracia
La Paz, Erbol
En el aniversario 31 de la recuperación de la democracia en Bolivia, académicos, políticos y defensores de derechos humanos destacan los progresos, asignaturas pendientes y algunos retrocesos del sistema.
El representante del Defensor del Pueblo en Santa Cruz, Hernán Cabrera, advirtió una preocupante ausencia de tolerancia política, pese a que en la actualidad el país tiene varios niveles de democracia.
“Si bien se avanzó en la participación política, porque hoy el ciudadano puede elegir al Presidente, Vicepresidente, parlamentarios, concejales, asambleístas, hay referéndums y se amplió la democracia a otros niveles (como el comunitario), también hay algunas situaciones pendientes, falta dar el rostro humano a esta democracia, en la que se invierta y se priorice los derechos humanos, además (vivimos) un poco de tolerancia política”, sostuvo.
Manfredo Menacho, decano de la Facultad de Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales de la Universidad Autónomas Gabriel René Moreno, agregó que en el país no existe respeto a la institucionalidad y a esta falencia se suma un Órgano Judicial débil.
“Hubo mucho avance en los municipios, gobernaciones, en el tema de la inclusión social, pero también hubieron retrocesos, porque todavía no hemos comprendido la verdadera dimensión de la democracia como es la institucionalidad, que sepan los gobernantes respetar la institucionalidad y que ellos se ocupen en su lugar que tienen que cumplir y dejar a otros órganos del Estado para que también puedan cumplir sus obligaciones”, manifestó.
Miriam Suárez, directora de la Casa de la Mujer, que vivió en la dictadura, aseguró que la democracia, por sí sola, no soluciona los problemas del país, de ahí que es sumamente necesario practicar un sistema participativo.
“El tema pendiente que tenemos en la democracia es lograr la mayor participación, creo que hemos aprehendido que la democracia no va resolver el asunto del hambre, del empleo, la vivienda, la democracia te permite condiciones para que la ciudadanía exija, reclame y se movilice”, sostuvo.
El pedagogo Álvaro Puente señaló que hay mucho por avanzar en la democracia boliviana, porque al Gobierno le falta el espíritu democrático.
“Todavía hay muchas cosas que avanzar, la democracia no sólo es el elegir y tener arriba al que nosotros hemos querido, democracia es ser parte del país, es participar, es ser un ciudadano con derechos y deberes, estamos en una etapa en la que le falta al gobierno el espíritu democrático, todavía falta que escuche a todos, que acepte a todos, todavía falta que cuando toma decisiones mire a la gente y escuche a la gente”, aseveró.
Rose Mary Sandóval, asambleísta departamental de Santa Cruz, fue más más pesimista que sus antecesores y aseguró que todo lo que se construyó en el sistema democrático del país se fue al “tacho”.
“Yo no olvido cuando viví en La Paz, no olvido el star en Pérez Velasco y arriba está la UDP, después de tantos procesos dictatoriales, tantas peleas, marchas por la vida, de los mineros, hemos ido avanzando, construyendo democracia, para que esto se vaya al tacho (ahora), lo que más se lamenta es que no puede haber democracia sino hay libertad de expresión y sino le permiten a la población ser”, puntualizó.
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En el aniversario 31 de la recuperación de la democracia en Bolivia, académicos, políticos y defensores de derechos humanos destacan los progresos, asignaturas pendientes y algunos retrocesos del sistema.
El representante del Defensor del Pueblo en Santa Cruz, Hernán Cabrera, advirtió una preocupante ausencia de tolerancia política, pese a que en la actualidad el país tiene varios niveles de democracia.
“Si bien se avanzó en la participación política, porque hoy el ciudadano puede elegir al Presidente, Vicepresidente, parlamentarios, concejales, asambleístas, hay referéndums y se amplió la democracia a otros niveles (como el comunitario), también hay algunas situaciones pendientes, falta dar el rostro humano a esta democracia, en la que se invierta y se priorice los derechos humanos, además (vivimos) un poco de tolerancia política”, sostuvo.
Manfredo Menacho, decano de la Facultad de Ciencias Jurídicas, Políticas y Sociales de la Universidad Autónomas Gabriel René Moreno, agregó que en el país no existe respeto a la institucionalidad y a esta falencia se suma un Órgano Judicial débil.
“Hubo mucho avance en los municipios, gobernaciones, en el tema de la inclusión social, pero también hubieron retrocesos, porque todavía no hemos comprendido la verdadera dimensión de la democracia como es la institucionalidad, que sepan los gobernantes respetar la institucionalidad y que ellos se ocupen en su lugar que tienen que cumplir y dejar a otros órganos del Estado para que también puedan cumplir sus obligaciones”, manifestó.
Miriam Suárez, directora de la Casa de la Mujer, que vivió en la dictadura, aseguró que la democracia, por sí sola, no soluciona los problemas del país, de ahí que es sumamente necesario practicar un sistema participativo.
“El tema pendiente que tenemos en la democracia es lograr la mayor participación, creo que hemos aprehendido que la democracia no va resolver el asunto del hambre, del empleo, la vivienda, la democracia te permite condiciones para que la ciudadanía exija, reclame y se movilice”, sostuvo.
El pedagogo Álvaro Puente señaló que hay mucho por avanzar en la democracia boliviana, porque al Gobierno le falta el espíritu democrático.
“Todavía hay muchas cosas que avanzar, la democracia no sólo es el elegir y tener arriba al que nosotros hemos querido, democracia es ser parte del país, es participar, es ser un ciudadano con derechos y deberes, estamos en una etapa en la que le falta al gobierno el espíritu democrático, todavía falta que escuche a todos, que acepte a todos, todavía falta que cuando toma decisiones mire a la gente y escuche a la gente”, aseveró.
Rose Mary Sandóval, asambleísta departamental de Santa Cruz, fue más más pesimista que sus antecesores y aseguró que todo lo que se construyó en el sistema democrático del país se fue al “tacho”.
“Yo no olvido cuando viví en La Paz, no olvido el star en Pérez Velasco y arriba está la UDP, después de tantos procesos dictatoriales, tantas peleas, marchas por la vida, de los mineros, hemos ido avanzando, construyendo democracia, para que esto se vaya al tacho (ahora), lo que más se lamenta es que no puede haber democracia sino hay libertad de expresión y sino le permiten a la población ser”, puntualizó.
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