La Casa Blanca acusa de sabotaje al partido Republicano
Nueva York, EP
La Casa Blanca ha condenado este sábado los intentos del partido Republicano para sacrificar la reforma sanitaria de Obama a cambio de la aprobación de un nuevo techo de deuda a través de un comunicado en el que acusa a la bancada republicana de "sabotaje".
El comunicado aparece después de que el Senado, de mayoría demócrata, aprobara su propia propuesta de ley para contrarrestar la aprobada en la Cámara de Representantes, dominada por los republicanos, en la que se recomendaba el reparto de los 988.000 millones de dólares reservados a la reforma sanitaria en otros ámbitos más acuciantes.
La contramedida aprobada por el Senado no hace mención a modificación alguna de la reforma, por lo que la ley vuelve de nuevo a la Cámara de Representantes donde se espera una lucha de desgaste. Si Cámara y Senado no alcanzan un acuerdo en este sentido antes del próximo 1 de octubre, día en el que comienza el nuevo año fiscal en EEUU, el Gobierno federal se veria afectado por un bloqueo presupuestario que impediría a las autoridades desarrollar sus operaciones cotidianas.
"Los republicanos del Congreso han dejado pasar la oportunidad de aprobar una resolución rutinaria y en su lugar han decidido mandar un mensaje ideológico al intentar sabotear la reforma", indicó la Casa Blanca.
"El presidente Obama ha demostrado que quiere mejorar la sanidad y hacer concesiones a los republicanos, pero no lo hará bajo la amenaza de un bloqueo del Gobierno federal", añadió el comunicado.
"Es hora de que la Cámara de Representantes escuche al pueblo americano, y que actúe, como ha hecho el Senado, de una manera razonable para aprobar una medida que permita al Gobierno seguir funcionando", concluyó la nota.
La Casa Blanca ha condenado este sábado los intentos del partido Republicano para sacrificar la reforma sanitaria de Obama a cambio de la aprobación de un nuevo techo de deuda a través de un comunicado en el que acusa a la bancada republicana de "sabotaje".
El comunicado aparece después de que el Senado, de mayoría demócrata, aprobara su propia propuesta de ley para contrarrestar la aprobada en la Cámara de Representantes, dominada por los republicanos, en la que se recomendaba el reparto de los 988.000 millones de dólares reservados a la reforma sanitaria en otros ámbitos más acuciantes.
La contramedida aprobada por el Senado no hace mención a modificación alguna de la reforma, por lo que la ley vuelve de nuevo a la Cámara de Representantes donde se espera una lucha de desgaste. Si Cámara y Senado no alcanzan un acuerdo en este sentido antes del próximo 1 de octubre, día en el que comienza el nuevo año fiscal en EEUU, el Gobierno federal se veria afectado por un bloqueo presupuestario que impediría a las autoridades desarrollar sus operaciones cotidianas.
"Los republicanos del Congreso han dejado pasar la oportunidad de aprobar una resolución rutinaria y en su lugar han decidido mandar un mensaje ideológico al intentar sabotear la reforma", indicó la Casa Blanca.
"El presidente Obama ha demostrado que quiere mejorar la sanidad y hacer concesiones a los republicanos, pero no lo hará bajo la amenaza de un bloqueo del Gobierno federal", añadió el comunicado.
"Es hora de que la Cámara de Representantes escuche al pueblo americano, y que actúe, como ha hecho el Senado, de una manera razonable para aprobar una medida que permita al Gobierno seguir funcionando", concluyó la nota.