Juez determina detención domiciliaria para Ramírez

La Paz, Erbol
El expresidente de Yacimientos Petrolíferos Fiscales Bolivianos (YPFB), Santos Ramírez, fue beneficiado ayer con la detención domiciliaria otorgado por la juez cuarto de Instrucción en lo Penal, Margoth Pérez, en el caso que se le sigue por la empresa Servicios e Industrias Petroleras Sociedad Anónima (SIPSA), creada como una filial de YPFB, de acuerdo a la declaración realizada por su abogado, Ramiro Vega.



“Él está detenido casi cuatro años, preventivamente, y el delito máximo por el que está siendo acusado tiene una pena máxima de ocho años y una mínima de dos, en ese sentido él ha superado el mínimo de la pena y se han dado las condiciones para que corresponda sin mayor discusión la detención domiciliaria en este caso”, señaló el jurista.

Vega aclaró que en el caso Catler Uniservis, donde Ramírez tiene una sentencia condenatoria de 12 años, su abogado, José Luis Paredes, presentará la misma solicitud a la jueza de la causa, debido a que el estado de salud de Ramírez es delicado. Actualmente se encuentra internado en la clínica Santa María de la zona de Miraflores.


Crítico estado de salud

En julio pasado, la defensa de Santos Ramírez, el abogado José Luís Paredes, presentó una solicitud al Ministerio Público para que le permitan detención domiciliaria de su cliente por su precario estado de salud. “La petición está basada en el certificado médico forense por lo que dependerá del Estado y Fiscalía que de manera objetiva determinarán si se puede aceptar”, dijo.

Un médico forense advirtió sobre un avance negativo de la enfermedad del estado del expresidente de YPFB (2008), quien fue uno de los hombres fuertes del Gobierno del MAS en los primeros años de asunción al mando del Estado.

Santos Ramírez hasta el momento cumplió cuatro años en la cárcel de San Pedro de una sentencia de 12 años por su participación en el caso Catler de julio de 2008. La justicia lo halló culpable porque cobró una millonaria coima mientras fungía como presidente de la estatal petrolera.

Ramírez hace dos meses que sufrió una parálisis facial del lado izquierdo por lo que fue evacuado de la cárcel de San Pedro a una clínica particular de la ciudad de La Paz. La exautoridad padecía del mal de Chagas y por la parálisis facial no podía comer, según Paredes.