Francia acepta con condiciones la propuesta rusa y pide "control internacional" para el arsenal químico sirio
París, EP
El ministro de Asuntos Exteriores francés, Laurent Fabius, ha calificado este lunes de "aceptable" la propuesta planteada por Rusia para que el régimen sirio ponga su arsenal químico "bajo control internacional", pero ha planteado una serie de "condiciones".
Fabius ha subrayado que gracias a la "presión" ejercida por países como Francia, Rusia se ha dado cuenta del "grave problema" que suponen las armas químicas en posesión del régimen de Bashar al Assad.
El jefe de la diplomacia gala ha reconocido en un comunicado que la oferta puesta este lunes sobre la mesa por el Gobierno ruso "merece un examen a fondo", aunque ya ha apuntado que sería "aceptable" si se dan "al menos tres condiciones".
El primero de estos requisitos pasa por que Al Assad se comprometa "sin retrasos a poner su arsenal químico bajo control internacional" y permita su "destrucción". Esta operación, ha añadido Fabius, "debe hacerse sobre la base de una resolución del Consejo de Seguridad (de la ONU), con un calendario corto y consecuencias cerradas si no se respetan los compromisos".
Como tercera condición, el Gobierno de Francia ha insistido en que "los responsables de la masacre química" ocurrida el 21 de agosto a las afueras de Damasco "no deben quedar impunes" y ha sugerido la intervención del Tribunal Penal Internacional (TPI).
El ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, ha explicado este lunes que su Gobierno ha pedido a Siria que ponga su arsenal químico bajo control internacional para su posterior destrucción, en un intento por evitar la intervención militar que ultima Estados Unidos.
El ministro de Exteriores sirio, Walid al Muallem, ha acogido con aparente interés esta iniciativa, que inicialmente llegó a creerse como propuesta del secretario de Estado estadounidense, John Kerry.
Kerry afirmó desde Londres que la única manera de que Estados Unidos diera marcha atrás en su intención de atacar al régimen de Bashar Al Assad sería que éste entregara en el plazo de una semana su arsenal de armas químicas, algo que posteriormente el Departamento de Estado ha matizado considerándolo un comentario "retórico".
El ministro de Asuntos Exteriores francés, Laurent Fabius, ha calificado este lunes de "aceptable" la propuesta planteada por Rusia para que el régimen sirio ponga su arsenal químico "bajo control internacional", pero ha planteado una serie de "condiciones".
Fabius ha subrayado que gracias a la "presión" ejercida por países como Francia, Rusia se ha dado cuenta del "grave problema" que suponen las armas químicas en posesión del régimen de Bashar al Assad.
El jefe de la diplomacia gala ha reconocido en un comunicado que la oferta puesta este lunes sobre la mesa por el Gobierno ruso "merece un examen a fondo", aunque ya ha apuntado que sería "aceptable" si se dan "al menos tres condiciones".
El primero de estos requisitos pasa por que Al Assad se comprometa "sin retrasos a poner su arsenal químico bajo control internacional" y permita su "destrucción". Esta operación, ha añadido Fabius, "debe hacerse sobre la base de una resolución del Consejo de Seguridad (de la ONU), con un calendario corto y consecuencias cerradas si no se respetan los compromisos".
Como tercera condición, el Gobierno de Francia ha insistido en que "los responsables de la masacre química" ocurrida el 21 de agosto a las afueras de Damasco "no deben quedar impunes" y ha sugerido la intervención del Tribunal Penal Internacional (TPI).
El ministro de Exteriores ruso, Sergei Lavrov, ha explicado este lunes que su Gobierno ha pedido a Siria que ponga su arsenal químico bajo control internacional para su posterior destrucción, en un intento por evitar la intervención militar que ultima Estados Unidos.
El ministro de Exteriores sirio, Walid al Muallem, ha acogido con aparente interés esta iniciativa, que inicialmente llegó a creerse como propuesta del secretario de Estado estadounidense, John Kerry.
Kerry afirmó desde Londres que la única manera de que Estados Unidos diera marcha atrás en su intención de atacar al régimen de Bashar Al Assad sería que éste entregara en el plazo de una semana su arsenal de armas químicas, algo que posteriormente el Departamento de Estado ha matizado considerándolo un comentario "retórico".