Assad dice ataque francés a Siria acarrearía "repercusiones"
París, Reuters
El presidente sirio, Bashar al-Assad, rechazó las acusaciones de que sus fuerzas estuvieron detrás de ataques químicos el mes pasado en las afueras de Damasco y advirtió que cualquier acción militar de Francia generaría "repercusiones negativas".
El presidente francés, Francois Hollande, junto con su homólogo estadounidense, Barack Obama, ha dicho que Assad debería ser castigado por el ataque con armas químicas del 21 de agosto que según Washington causó la muerte de 1.400 personas, incluidos niños sirios.
El Gobierno sirio dice que el ataque fue perpetrado por rebeldes, a los que a menudo se refiere como "terroristas".
Assad dijo que no tendría sentido usar armas químicas en una zona en la que sus tropas también están luchando.
"Quienes levantan las acusaciones deben mostrar evidencias. Desafiamos a Estados Unidos y Francia a presentar aunque sea una prueba. (Los presidentes) Obama y Hollande han sido incapaces de hacerlo", dijo en una entrevista al diario francés Le Figaro.
"Cualquiera que contribuya financiera o militarmente a reforzar a los terroristas es un enemigo del pueblo sirio. Si las políticas del estado francés son hostiles al pueblo sirio, el Estado será su enemigo", añadió.
"Habrá repercusiones, negativas por supuesto, sobre los intereses franceses", sostuvo.
Francia ha respaldado a los rebeldes sirios desde el comienzo del conflicto de dos años y medio. Al país europeo le preocupa que el espiral de violencia se propague por el Líbano, donde viven alrededor de 20.000 ciudadanos franceses y operan numerosas compañías galas.
Fuentes diplomáticas dicen que París teme que las fuerzas de Assad ataquen sus intereses en respuesta a una eventual ofensiva de Occidente.
"Oriente Medio es un polvorín y el fuego se está aproximando", dijo Assad, de acuerdo a extractos de la entrevista publicada el lunes.
"No deberíamos hablar sólo de una respuesta siria, sino de lo que pasaría después del primer ataque. Todos perderán control de la situación cuando estalle el polvorín", aseveró.
Importantes miembros del partido gobernante francés rechazaron los llamados de la oposición para que se realice una votación en el Parlamento que resuelva si tomar o no acciones militares en Siria, y dijeron el lunes que los legisladores deberían respetar el derecho constitucional del presidente a decidir sobre estos operativos.
El presidente sirio, Bashar al-Assad, rechazó las acusaciones de que sus fuerzas estuvieron detrás de ataques químicos el mes pasado en las afueras de Damasco y advirtió que cualquier acción militar de Francia generaría "repercusiones negativas".
El presidente francés, Francois Hollande, junto con su homólogo estadounidense, Barack Obama, ha dicho que Assad debería ser castigado por el ataque con armas químicas del 21 de agosto que según Washington causó la muerte de 1.400 personas, incluidos niños sirios.
El Gobierno sirio dice que el ataque fue perpetrado por rebeldes, a los que a menudo se refiere como "terroristas".
Assad dijo que no tendría sentido usar armas químicas en una zona en la que sus tropas también están luchando.
"Quienes levantan las acusaciones deben mostrar evidencias. Desafiamos a Estados Unidos y Francia a presentar aunque sea una prueba. (Los presidentes) Obama y Hollande han sido incapaces de hacerlo", dijo en una entrevista al diario francés Le Figaro.
"Cualquiera que contribuya financiera o militarmente a reforzar a los terroristas es un enemigo del pueblo sirio. Si las políticas del estado francés son hostiles al pueblo sirio, el Estado será su enemigo", añadió.
"Habrá repercusiones, negativas por supuesto, sobre los intereses franceses", sostuvo.
Francia ha respaldado a los rebeldes sirios desde el comienzo del conflicto de dos años y medio. Al país europeo le preocupa que el espiral de violencia se propague por el Líbano, donde viven alrededor de 20.000 ciudadanos franceses y operan numerosas compañías galas.
Fuentes diplomáticas dicen que París teme que las fuerzas de Assad ataquen sus intereses en respuesta a una eventual ofensiva de Occidente.
"Oriente Medio es un polvorín y el fuego se está aproximando", dijo Assad, de acuerdo a extractos de la entrevista publicada el lunes.
"No deberíamos hablar sólo de una respuesta siria, sino de lo que pasaría después del primer ataque. Todos perderán control de la situación cuando estalle el polvorín", aseveró.
Importantes miembros del partido gobernante francés rechazaron los llamados de la oposición para que se realice una votación en el Parlamento que resuelva si tomar o no acciones militares en Siria, y dijeron el lunes que los legisladores deberían respetar el derecho constitucional del presidente a decidir sobre estos operativos.