¿Dónde está Merkel?
Berlín, El Mundo
Si hasta ahora Ángela Merkel nos parecía omnipresente, preparémonos para la que se avecina. Su partido, la CDU, presentó ayer la campaña electoral a la que destinará 20 millones de euros, junto con la serie de 9.000 carteles en los que se repite irremediablemente la efigie de la canciller alemana y que a partir del fin de semana cubrirán vallas publicitarias por toda Alemania. Pero la presencia de Merkel en el verano político de Berlín, a siete semanas de las elecciones, termina exactamente ahí, en los carteles. ¿Dónde está Merkel?
La canciller no ha acudido a la presentación de la campaña y no se la espera hasta mediados de mes, a pesar de que los niños berlineses han cumplido religiosamente con la vuelta al cole el pasado lunes y a pesar de que su contrincante electoral, el socialdemócrata Peer Steinbrück, está inmerso ya en una agobiante agenda en la que no falta una cita diaria con la prensa.
El hecho de que Merkel siga casi de incógnito en el Tirol austríaco, con su marido y un par de guardaespaldas, es una muestra más de su impasibilidad ante los acontecimientos coyunturales. Y quizá también un síntoma de lo poco que se toma en serio la amenaza electoral que pueda suponer Steinbrtück.
La victoria pende de un hilo
Con su 40% en las encuestas, Merkel sigue muy por delante de un rival que apenas llega al 27%. Y aunque la victoria penda de un hilo, debido a que sus socios liberales del FDP corren serio riesgo de no lograr el mínimo 5% que exige la presencia parlamentaria, con lo que la actual coalición de gobierno no podría reeditarse, poco puede hacer ella en ese frente, así que su estrategia parece ser continuar oculta en las montañas y dejar que la precampaña transcurra dos semanas en su ausencia.
En plena precampaña, la imagen de Merkel abandonando el campo de juego con Joachim Sauer, su esposo, que es el que avanza tras ella cargando con una bolsa de supermercado en esta foto tomada en el aeropuerto de Innsbruck, ilustra al a perfección el hecho de que el resultado de estas elecciones se decidirá después de la votación de las urnas, y no antes.
Propuesta envenenada de Steinbrück
Hará los deberes y, a partir del 14 de agosto, tomará parte en uno y hasta dos actos de campaña diarios, pero serán las negociaciones para formar nueva coalición de gobierno, posteriores a las votaciones, en las que Merkel dará la gran batalla. Mientras tanto, y como no podía ser de otra forma, en ausencia del gato bailan los ratones.
Steinbrück ha aprovechado las vacaciones de la canciller para soltar una propuesta envenenada a sus adversarios de la CDU: la formación de una gran coalición de gobierno, a cambio de que se deshagan de Angela Merkel. Ha sugerido en una entrevista concedida a la cadena pública de televisión ZDF que podría plantearse una gran coalición con la condición de que la CDU ofreciese otro nombre y otro apellido para ocupar la Cancillería de Berlín, removiendo odios fratricidas en el seno del parito cristianodemócrata y tratando de sacar tajada de las enemistades internas que Merkel ha ido cosechando a lo largo y ancho de dos legislaturas.
Los altos cargos del partido han hecho oídos sordos a la tentación, pero Horst Seehofer, el presidente de Baviera y líder de la CSU, partido hermano bávaro, ha dicho al diario 'Der Spiegel' que, "en el hipotético caso de que los liberales no alcancen el 5%, lo único que puedo adelantar son unas negociaciones entre partidos totalmente imprevisibles".
