En este caso, de jugar Casillas, y mantenerse, tomaría fuerza la teoría de que el técnico había lanzado un globo sonda para ver cómo respiraba el personal, al tiempo que perdería gas la creencia de que la puesta en escena de Diego López era un aviso al vestuario de quién manda ahí.
Lo cierto es que en todos sus equipos la uniformidad ha sido tónica común en el quehacer de Ancelotti. Veamos lo que hizo en las tres últimas temporadas: durante su estancia en el París Saint-Germain en la última campaña, Ancelotti se encomendó a Salvatore Sirigu como titular en Liga y Champions, mientras que el francés Nicolas Douchez jugó la Copa de Francia y la Copa de la Liga.
Poco antes, en las dos temporadas que entrenó al Chelsea (2009-2011), dio la titularidad fija a Petr Cech, portero checo que durante muchos años ha sido considerado el tercer mejor guardameta del mundo tras Casillas y Buffon. En su primera campaña, en la que ganó la Premier y la FA Cup, Cech jugó casi todos los encuentros de Liga y Champions, además de los dos últimos partidos de la FA Cup. El resto quedaron para el portugués Henrique Hilario y el inglés Ross Turnbull, con el luso como portero suplente.
El último año la tónica fue similar. Cech lo jugó casi todo e Hilario ni jugó. Turnbull sólo disputó un partido de Liga de Campeones y otro de la Copa de la Liga.
De cualquier forma, ninguno de estos equipos son representativos porque en ninguno de ellos había dos porteros de similar valía como le sucede ahora en el Real Madrid. El ejemplo que más nos puede orientar al respecto es la última temporada que entrenó al Milán (equipo al que dirigió durante ocho campañas).
Ese último año, Ancelotti contó con Abbiatti y con el brasileño Dida, ambos de similar calibre. Entonces apostó por Abbiati en la Liga y por Dida en la Copa de la UEFA y la Copa italiana, aunque una grave lesión del primero de ellos propició que el brasileño acabara jugando hasta diez partidos de la Serie A. En resumen, a tenor de su pasado es poco probable que Ancelotti rote arquero en la Liga, pero es casi seguro que apueste por su segundo portero, al menos, en la Copa del Rey. Al menos, eso indica su historial.
Sus porteros
París Saint-Germain: El italiano Salvatore Sirigu fue titular indiscutible en la Liga, pero Nicolas Douchez jugó la Copa y Copa de la Liga.
Chelsea: Ancelotti se entregó a las manos del checo Petr Cech, que apenas dio opción a Hilario o Turnbull.
Milán: Abbiati fue el primero y Dida el segundo. Eran parejos hasta que se lesionó el primero.
Juventus: Los primeros años fueron de Peruzzi y cuando este se fue al Inter, Van der Saar fue el rey.
Parma: Vía libre para un jovencísimo Buffon, que creció a la sombra de Ancelotti.