Al Beblawi descarta la disolución de los Hermanos Musulmanes en Egipto
El Cairo, EP
El primer ministro provisional de Egipto, Hazem al Beblawi, ha descartado la disolución de Hermanos Musulmanes y ha asegurado que excluirlos del proceso político "no es la solución", según informa la agencia de noticias Reuters.
Al Beblawi había propuesto el pasado 17 de agosto la disolución legal de Hermanos Musulmanes, una idea que el Gobierno ha estado analizando hasta ahora. No obstante, en una entrevista concedida a la televisión egipcia y publicada por los medios locales a última hora del martes, el primer ministro ha asegurado que, en lugar de disolverlo, "supervisarán al grupo y a su brazo político" y que "las acciones de sus miembros serán las que determinen su propio destino".
"Disolver el partido o el grupo no es la solución. No es correcto tomar decisiones en situaciones tan turbulentas", ha asegurado Al Beblawi, según ha informado la agencia de noticias estatal MENA. "Es mejor para nosotros supervisar las diversas formaciones en el marco de la acción política, sin disolverlos ni obligarles a actuar en secreto", ha añadido.
El grupo Hermanos Musulmanes, fundado en 1928, fue disuelto por el Gobierno militar en 1954. A pesar de haber sido ilegal durante las tres décadas de Gobierno de Hosni Mubarak, el grupo, operando en las sombras, fue ganando respaldo popular gracias a su predicación y a sus obras de caridad. El grupo se registró como organización no gubernamental en marzo, en respuesta a un caso llevado ante el tribunal en el que se cuestionaba su legalidad.
El brazo político de Hermanos Musulmanes, el Partido de la Justicia y la Libertad, se estableció como formación política después del levantamiento que provocó la caída de Mubarak. El partido de Hermanos Musulmanes ha ganado cinco elecciones nacionales desde 2011, entre las que se encuentra la elección presidencial que ganó Mursi en 2012.
El Gobierno interino respaldado por el Ejército ha asegurado que hará un llamamiento a elecciones parlamentarias y presidenciales en los próximos meses, después de las enmiendas a la Constitución.
El primer ministro provisional de Egipto, Hazem al Beblawi, ha descartado la disolución de Hermanos Musulmanes y ha asegurado que excluirlos del proceso político "no es la solución", según informa la agencia de noticias Reuters.
Al Beblawi había propuesto el pasado 17 de agosto la disolución legal de Hermanos Musulmanes, una idea que el Gobierno ha estado analizando hasta ahora. No obstante, en una entrevista concedida a la televisión egipcia y publicada por los medios locales a última hora del martes, el primer ministro ha asegurado que, en lugar de disolverlo, "supervisarán al grupo y a su brazo político" y que "las acciones de sus miembros serán las que determinen su propio destino".
"Disolver el partido o el grupo no es la solución. No es correcto tomar decisiones en situaciones tan turbulentas", ha asegurado Al Beblawi, según ha informado la agencia de noticias estatal MENA. "Es mejor para nosotros supervisar las diversas formaciones en el marco de la acción política, sin disolverlos ni obligarles a actuar en secreto", ha añadido.
El grupo Hermanos Musulmanes, fundado en 1928, fue disuelto por el Gobierno militar en 1954. A pesar de haber sido ilegal durante las tres décadas de Gobierno de Hosni Mubarak, el grupo, operando en las sombras, fue ganando respaldo popular gracias a su predicación y a sus obras de caridad. El grupo se registró como organización no gubernamental en marzo, en respuesta a un caso llevado ante el tribunal en el que se cuestionaba su legalidad.
El brazo político de Hermanos Musulmanes, el Partido de la Justicia y la Libertad, se estableció como formación política después del levantamiento que provocó la caída de Mubarak. El partido de Hermanos Musulmanes ha ganado cinco elecciones nacionales desde 2011, entre las que se encuentra la elección presidencial que ganó Mursi en 2012.
El Gobierno interino respaldado por el Ejército ha asegurado que hará un llamamiento a elecciones parlamentarias y presidenciales en los próximos meses, después de las enmiendas a la Constitución.