Neymar debuta sin victoria en el Barcelona
Legia, As
Al Barça pudo salirle caro, carísimo, eso de quedar bien con los aficionados del Lechia Gdansk. Para compensar la anulación del partido de la semana pasada, el club hizo viajar a Neymar. Con 2-2 en el marcador y a falta de 10 minutos para el final, Roura llamó al brasileño. No para jugar junto a Messi. Ni siquiera para sustituirlo (no fuera caso que alguien hiciera la lectura maligna del cambio). Lo hizo salir por Alexis y lo dejó solo ante el peligro. Y nunca mejor dicho. Como si de una presa se tratara, la zaga polaca persiguió por todos los rincones del campo a Neymar, que en los 10 minutitos que estuvo sobre el terreno de juego fue al suelo en varias ocasiones y acabó desesperado reclamando más protección al árbitro. Así las cosas, entre lo poco que lo puso Roura y lo mucho que le pegaron, el crack brasileño apenas pudo brillar.
Al margen de Neymar, lo de ayer en Polonia pues fue un trámite. La lógica impone no sacar demasiadas conclusiones de un partido de pretemporada. Menos aún si un equipo está mucho más rodado que el otro, como fue el caso. Y ya ni digamos si media plantilla (vamos, los buenos) se ha quedado en Barcelona.
El Barça se fue con un empate de Gdansk y sensaciones encontradas. Que lo del central, por ejemplo, urge. Bartra sufrió más de lo necesario ante una delantera que tampoco era nada del otro jueves. Que en Sergi Roberto hay un gran centrocampista capaz de asumir el papel de Thiago. Que Alexis sigue siendo un querer y no poder constante. Que Messi siempre aparece. Que las jugadas a balón parado siguen siendo una asignatura pendiente.
Así llegó el primer gol del Lechia: de córner. Matsui lo botó y Bienluk lo remató saltando más que Bartra y Sergi Roberto. Luego empataría este último tras una buena carrera por la banda de Montoya. El lateral dio la de cal en esa jugada y la de arena en la del segundo gol local. Se durmió, le robaron la cartera y Grzelczak puso el 2-1. Pero Messi siempre está de guardia. Suyo fue el 2-2, que llegó justo antes de que se abriera la veda con Neymar.
Legia Gdansk: Bak; Deleu, Bieniuk, Madera, Pazio; Frankowski, Dawidowicz, Zyska, Grzelczak; Matusi y Buzala. También jugaron: Zyska Wojciech; Tuszynski; Bak; Mostrzewa y Lazaj.
Barcelona: Pinto; Montoya, Sergi Gómez, Bartra, Adriano; Song, Dos Santos, Sergi Roberto; Alexis, Messi y Tello. También jugaron: Joan Román; Paredes; Javi Espinosa; Femenía; Ílie; Patric; Planas; Bagnack; Samper; Neymar y Dongou.
Goles: 1-0. m.4: Bieniuk; 1-1. m 25. Sergi Roberto; 2-1. m 49. Grzelczak; 2-2. m 56. Messi.
Árbitro: Pawel Gil (PL). Tarjetas: Frankowski (Amarilla) y Tuszynski (amarilla).
Incidencias: Tercer partido de la pretemporada del Barcelona, disputado en el Gdansk Arena de la ciudad polaca, ante unos 30.000 espectadores. Los aficionados polacos al Barcelona desplegaron una gran pancarta en uno de los fondos instantes antes del arranque del amistoso y recibieron con vítores la incorporación de Neymar. El jugador polaco de la NBA Marcin Gortat fue el anfitrión del encuentro. Se guardó un minuto de silencio antes del comienzo del partido en recuerdo del ex guardameta azulgrana Antonio Ramallets, fallecido hoy.
Al Barça pudo salirle caro, carísimo, eso de quedar bien con los aficionados del Lechia Gdansk. Para compensar la anulación del partido de la semana pasada, el club hizo viajar a Neymar. Con 2-2 en el marcador y a falta de 10 minutos para el final, Roura llamó al brasileño. No para jugar junto a Messi. Ni siquiera para sustituirlo (no fuera caso que alguien hiciera la lectura maligna del cambio). Lo hizo salir por Alexis y lo dejó solo ante el peligro. Y nunca mejor dicho. Como si de una presa se tratara, la zaga polaca persiguió por todos los rincones del campo a Neymar, que en los 10 minutitos que estuvo sobre el terreno de juego fue al suelo en varias ocasiones y acabó desesperado reclamando más protección al árbitro. Así las cosas, entre lo poco que lo puso Roura y lo mucho que le pegaron, el crack brasileño apenas pudo brillar.
Al margen de Neymar, lo de ayer en Polonia pues fue un trámite. La lógica impone no sacar demasiadas conclusiones de un partido de pretemporada. Menos aún si un equipo está mucho más rodado que el otro, como fue el caso. Y ya ni digamos si media plantilla (vamos, los buenos) se ha quedado en Barcelona.
El Barça se fue con un empate de Gdansk y sensaciones encontradas. Que lo del central, por ejemplo, urge. Bartra sufrió más de lo necesario ante una delantera que tampoco era nada del otro jueves. Que en Sergi Roberto hay un gran centrocampista capaz de asumir el papel de Thiago. Que Alexis sigue siendo un querer y no poder constante. Que Messi siempre aparece. Que las jugadas a balón parado siguen siendo una asignatura pendiente.
Así llegó el primer gol del Lechia: de córner. Matsui lo botó y Bienluk lo remató saltando más que Bartra y Sergi Roberto. Luego empataría este último tras una buena carrera por la banda de Montoya. El lateral dio la de cal en esa jugada y la de arena en la del segundo gol local. Se durmió, le robaron la cartera y Grzelczak puso el 2-1. Pero Messi siempre está de guardia. Suyo fue el 2-2, que llegó justo antes de que se abriera la veda con Neymar.
Legia Gdansk: Bak; Deleu, Bieniuk, Madera, Pazio; Frankowski, Dawidowicz, Zyska, Grzelczak; Matusi y Buzala. También jugaron: Zyska Wojciech; Tuszynski; Bak; Mostrzewa y Lazaj.
Barcelona: Pinto; Montoya, Sergi Gómez, Bartra, Adriano; Song, Dos Santos, Sergi Roberto; Alexis, Messi y Tello. También jugaron: Joan Román; Paredes; Javi Espinosa; Femenía; Ílie; Patric; Planas; Bagnack; Samper; Neymar y Dongou.
Goles: 1-0. m.4: Bieniuk; 1-1. m 25. Sergi Roberto; 2-1. m 49. Grzelczak; 2-2. m 56. Messi.
Árbitro: Pawel Gil (PL). Tarjetas: Frankowski (Amarilla) y Tuszynski (amarilla).
Incidencias: Tercer partido de la pretemporada del Barcelona, disputado en el Gdansk Arena de la ciudad polaca, ante unos 30.000 espectadores. Los aficionados polacos al Barcelona desplegaron una gran pancarta en uno de los fondos instantes antes del arranque del amistoso y recibieron con vítores la incorporación de Neymar. El jugador polaco de la NBA Marcin Gortat fue el anfitrión del encuentro. Se guardó un minuto de silencio antes del comienzo del partido en recuerdo del ex guardameta azulgrana Antonio Ramallets, fallecido hoy.