Copa de Oro: Estados Unidos goleó a El Salvador y pasó a semifinales


Baltimore, As
Estados Unidos, que se mantuvo invicto en el torneo, vuelve una edición más a las semifinales, que disputará contra el ganador del último partido de cuartos de final que jugarán las selecciones de Costa Rica y Honduras, el próximo miércoles, en el Cowboys Stadium, de Arlington (Texas).


El partido no tuvo más historia que comprobar la superioridad de Estados Unidos, que dominó de principio a fin el ritmo del juego y además tuvo en el veterano delantero Landon Donovan a la gran estrella al marcar gol y dar otras tres asistencias. La selección de las barras y las estrellas se adueñó desde el inicio del centro del campo y del balón y sólo tuvo que esperar hasta los 21 minutos para conseguir el primer gol por mediación del defensa Clarence Goodson, que había llegado a rematar un saque de esquina.

El balón se lo puso Donovan y el gol hizo que el dominio de Estados Unidos se transformarse en el segundo gol, marcado a los 29 minutos por el hispano Joe Corona, que junto a su compañero fue otro de los destacados de la selección anfitriona.

El Salvador intentaba reconstruir el centro del campo, pero sin éxito, y sólo las acciones individuales del delantero Rodolfo Zelaya hicieron posible que a los 39 minutos el propio jugador lograse el gol que sería el del honor de su equipo. La anotación levantó la moral de los jugadores salvadoreños, que se sintieron que habían entrado de nuevo en el partido aunque al descanso se fuesen abajo en el marcador (2-1).

El inicio de la segunda parte no pudo ser más esperanzadora para El Salvador porque por fin pudieron dominar en el centro del campo y en los 10 primeros minutos tuvieron claras oportunidades, especialmente la del recién incorporado Kevin Santamaría, que no supieron aprovechar.

Pero cuando más cerca había estado El Salvador de conseguir el gol del empate, surgió la jugada clave del partido, al minuto 60, con la entrada por Estados Unidos del delantero Eddie Johnson, que en su primera acción, un remate de cabeza a un centro de Donovan, se convirtió en el 3-1 para su equipo.

Johnson, que había sustituido al goleador Chris Wondolowski, que por segundo partido consecutivo no marcó, a penas llevaba 17 segundos en el campo cuando logró su primera diana en lo que va del torneo.

El gol hundió a los jugadores salvadoreños, que se vinieron abajo por completo, mientras que Donovan siguió con su exhibición de juego, marcó el 4-1 a los 78 minutos, segundo que logra en el torneo y el 54 con la selección, y todavía tuvo tiempo y fuerzas para darle otro pase a Mikkel Diskerud, que a los 84 lograse de cabeza el definitivo 5-1.

Estados Unidos jugaba a placer, enfrente ya no tenía rival, y la goleada no fue aun mayor porque la suerte al final estuvo del lado de El Salvador, que una vez más no pudo superar al equipo que lo ha ganado 15 de las 21 veces que se han enfrentado, con sólo un triunfo a su favor y cuatro empates.

Mientras la selección de las barras y las estrellas por tercer partido en lo que va del torneo marco cuatro o más goles y ya lleva un total de 16, el que más de los equipos que siguen en la competición.


Estados Unidos: Nick Rimando; Michael Parkhurst, Clarence Goodson, Matt Besler (m. Michael Orozco), Damarcus Beasley; Kyle Beckerman, Joe Corona, Mikkel Diskerud, José Torres (m.66, Brek Shea); Landon Donovan y Chris Wondolowski (m.60, Eddie Johnson). Seleccionador: Jurgen Klinsmann.

El Salvador: Dagoberto Portillo; Moisés García, Víctor Turcios, José Henríquez, Marcelo Posadas; Darwin Ceren, Josue Flores, Richard Menjívar, William Romero (m.46, Kevin Santamaría); Marc Blanco (m.46, Rafael Burgos) y Rodolfo Zelaya (m.73, Gerson Mayén). Seleccionador: Alberto Castillo

Goles: 1-0, m.21: Clarence Goodson. 2-0, m.29: Joe Corona. 2-1, m.39, Rodolfo Zelaya. 3-1, m.60: Eddie Johnson. 4-1, mi.78, Landon Donovan. 5-1, m.84: Mikkel Diskerud.

Árbitro: Enrico Wijngaarde. Amonestó a Darwin Cerén.

Incidencias: Partido de cuartos de final de la duodécima edición de la Copa Oro de la Concacaf que se disputó en el M&T Bank Stadium, de Baltimore, ante más de 71.000 espectadores.

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