Bolivia no cederá ante amedrentamientos y provocaciones foráneas (Morales)
La Paz, ABI
El presidente Evo Morales advirtió la noche del miércoles al jueves, a su retorno de Rusia, que implicó una posada obligada en Austria, que Bolivia no cederá ante intimidación y provocación algunas, en alusión a la inopinada negativa inicial de 4 países europeos de que el avión oficial boliviano sobrevuele y utilice aeropuertos.
'Nunca nos van intimidar porque somos un pueblo que tiene dignidad y soberanía', afirmó el mandatario en una corta alocución pronunciada en un atril emplazado sobre la franja del aeropuerto de la ciudad de El Alto, donde el avión de la Presidencia de Bolivia se posó, finalmente, hacia las 23h00 locales del miércoles tras 18 horas de vuelo desde que partió de Viena.
Morales, que se dijo sorprendido por la decisión inicial de Francia, que cerró su espacio aéreo, el martes por la tarde, cuando el avión oficial boliviano se encontraba a punto de ingresar a territorio galo, dijo que incidente debe ser tomado como 'una abierta provocación al continente' latinoamericano.
La Paz, que calificó la retención del avión boliviano de 'secuestro imperial', denunció que Washington se encontraba tras la treta y analistas locales advirtieron que se trata, en el fondo, de una advertencia a la región.
La espera de casi 10 horas en el aeropuerto de Viena, donde aterrizó de emergencia, después que Francia, Portugal, Italia y España le volcarán repentinamente la espalda y prohibieran operar en sus aeródromos, tuvo un trasfondo, señaló el mandatario boliviano.
'Para amedrentarnos e intimidarnos', dijo luego de expresar su contento por los acuerdos de integración e inversión binacional, específicamente en los rubros de hidrocarburos y energía, que rubricó con su colega ruso Vladimir Putin, con quien se encontró en Moscú el lunes último.
'Venía muy contento pensando en esa nueva inversión (comprometida por la estatal rusa Gazprom) y, al momento de entrar al territorio de Francia los pilotos de nuestro avión nos infoirman que nos habían quitado el ingreso al territorio de Francia', contó el jefe de Estado.
El gobernante boliviano había asistido, entre lunes y martes, a la Cumbre de Países Exportadores de Gas que celebró en la capital del país euroasiático.
Enfundado en una campera de cuero para solventar el invierno en El Alto, Morales, que el jueves concurrirá a la Cumbre de la Unión de Naciones Sudamericanas, convocada de emergencia en la ciudad boliviana de Cochabamba, saludó, por último, las expresiones de solidaridad que recibió de la comunidad, organizaciones sociales y gobiernos progresistas de la región.
El mandatario no se refirió, ni siquiera de refilón, a la sospecha de que su avión podría haber trasladado de contrabando al ex agente de la inteligencia de EEUU, Edward Snowden, perseguido por Washington y que hace caso dos semanas permanece refugiado en el aeropuerto de Moscú.
El presidente Evo Morales advirtió la noche del miércoles al jueves, a su retorno de Rusia, que implicó una posada obligada en Austria, que Bolivia no cederá ante intimidación y provocación algunas, en alusión a la inopinada negativa inicial de 4 países europeos de que el avión oficial boliviano sobrevuele y utilice aeropuertos.
'Nunca nos van intimidar porque somos un pueblo que tiene dignidad y soberanía', afirmó el mandatario en una corta alocución pronunciada en un atril emplazado sobre la franja del aeropuerto de la ciudad de El Alto, donde el avión de la Presidencia de Bolivia se posó, finalmente, hacia las 23h00 locales del miércoles tras 18 horas de vuelo desde que partió de Viena.
Morales, que se dijo sorprendido por la decisión inicial de Francia, que cerró su espacio aéreo, el martes por la tarde, cuando el avión oficial boliviano se encontraba a punto de ingresar a territorio galo, dijo que incidente debe ser tomado como 'una abierta provocación al continente' latinoamericano.
La Paz, que calificó la retención del avión boliviano de 'secuestro imperial', denunció que Washington se encontraba tras la treta y analistas locales advirtieron que se trata, en el fondo, de una advertencia a la región.
La espera de casi 10 horas en el aeropuerto de Viena, donde aterrizó de emergencia, después que Francia, Portugal, Italia y España le volcarán repentinamente la espalda y prohibieran operar en sus aeródromos, tuvo un trasfondo, señaló el mandatario boliviano.
'Para amedrentarnos e intimidarnos', dijo luego de expresar su contento por los acuerdos de integración e inversión binacional, específicamente en los rubros de hidrocarburos y energía, que rubricó con su colega ruso Vladimir Putin, con quien se encontró en Moscú el lunes último.
'Venía muy contento pensando en esa nueva inversión (comprometida por la estatal rusa Gazprom) y, al momento de entrar al territorio de Francia los pilotos de nuestro avión nos infoirman que nos habían quitado el ingreso al territorio de Francia', contó el jefe de Estado.
El gobernante boliviano había asistido, entre lunes y martes, a la Cumbre de Países Exportadores de Gas que celebró en la capital del país euroasiático.
Enfundado en una campera de cuero para solventar el invierno en El Alto, Morales, que el jueves concurrirá a la Cumbre de la Unión de Naciones Sudamericanas, convocada de emergencia en la ciudad boliviana de Cochabamba, saludó, por último, las expresiones de solidaridad que recibió de la comunidad, organizaciones sociales y gobiernos progresistas de la región.
El mandatario no se refirió, ni siquiera de refilón, a la sospecha de que su avión podría haber trasladado de contrabando al ex agente de la inteligencia de EEUU, Edward Snowden, perseguido por Washington y que hace caso dos semanas permanece refugiado en el aeropuerto de Moscú.