Un tribunal egipcio condena a la horca a cinco extranjeros
El Cairo, EP
Un tribunal egipcio ha condenado a morir en la horca a cinco ciudadanos extranjeros, incluido un británico, acusados de intentar introducir de contrabando cinco toneladas de hachís, según ha informado un portavoz judicial.
El portavoz ha identificado a cuatro de los condenados como el británico Charles Raymond Ferndale, de 74 años, y tres ciudadanos de las islas Seychelles. Una quinta persona, de nacionalidad paquistaní, escapó mientras se encontraba en prisión provisional y ha sido sentenciado 'in absentia'.
Los cinco fueron detenidos en 2011 a bordo de un barco frente a las cosas de Egipto. Los cuatro que seguían detenidos han comparecido este lunes en un tribunal de Hurghada, en la costa del mar Rojo, y han seguido la lectura de la sentencia desde una jaula.
El Ministerio de Exteriores de Reino Unido se ha mostrado "muy preocupado" por la sentencia y ha reiterado su oposición a la pena capital "en todas las circunstancias". "Nuestro equipo consular en El Cairo está en contacto con el detenido y haremos todo lo que podamos para impedir la ejecución", ha explicado un portavoz de Londres.
Los condenados pueden recurrir el veredicto dictado este lunes, en el que también figuran multas por valor de 94 millones de libras egipcias (10,2 millones de euros). Las autoridades egipcias no suelen aplicar las condenas de muerte.
Un tribunal egipcio ha condenado a morir en la horca a cinco ciudadanos extranjeros, incluido un británico, acusados de intentar introducir de contrabando cinco toneladas de hachís, según ha informado un portavoz judicial.
El portavoz ha identificado a cuatro de los condenados como el británico Charles Raymond Ferndale, de 74 años, y tres ciudadanos de las islas Seychelles. Una quinta persona, de nacionalidad paquistaní, escapó mientras se encontraba en prisión provisional y ha sido sentenciado 'in absentia'.
Los cinco fueron detenidos en 2011 a bordo de un barco frente a las cosas de Egipto. Los cuatro que seguían detenidos han comparecido este lunes en un tribunal de Hurghada, en la costa del mar Rojo, y han seguido la lectura de la sentencia desde una jaula.
El Ministerio de Exteriores de Reino Unido se ha mostrado "muy preocupado" por la sentencia y ha reiterado su oposición a la pena capital "en todas las circunstancias". "Nuestro equipo consular en El Cairo está en contacto con el detenido y haremos todo lo que podamos para impedir la ejecución", ha explicado un portavoz de Londres.
Los condenados pueden recurrir el veredicto dictado este lunes, en el que también figuran multas por valor de 94 millones de libras egipcias (10,2 millones de euros). Las autoridades egipcias no suelen aplicar las condenas de muerte.
