Rosario, Olé
Por lo general, la neblina suele confundir a los inmersos en ella. Se hace complicado ver el camino, encontrar una salida. Aunque en Rosario, con este fenómeno meteorológico presente, Newell’s sí consiguió la brújula para demoler a Unión, ya descendido. Lo venció con suma claridad, por 5-0 para seguir como único líder en el Final. A dos fechas para la conclusión, es pura ilusión. Y ganando un partido (le quedan Atlético Rafaela y Argentinos), se asegura el primer puesto.
Durante los primeros minutos, a la Lepra le costó encontrarle la vuelta al partido. El Tatengue, pese a no jugar por nada, se mostraba como un rival duro, al que no era fácil entrarle. Y hasta amenazaba con sus ataques. Lentamente, tras algunos minutos de duda, el equipo de Martino fue prevaleciendo. Comenzó a generar. A la par, a desperdiciar situaciones, especialmente de contra. Hasta que a los 31 minutos, tras un centro, Maxi Rodríguez, de cabeza, abrió el marcador. Y no sólo el resultado, sino también el juego. Los de Sava perdieron la calma, se desordenaron y Newell’s aprovechó para apretar el acelerador. Once más tarde, Nacho Scocco, que se había comido un claro mano a mano, amplió la diferencia.
Sin especular, tratando de aumentar aún más el marcador, el local continuó atacando en la segunda parte. Tenía hambre. Quería más. Y, fue Gabriel Heinze el que puso el tercer tanto en la noche rosarina. El Gringo, uno de los pilares de este puntero, se hizo presente en la red. Nada que hacer para Unión, un invitado a la fiesta leprosa. Un monólogo de los del Tata, que se florearon. El propio Rodríguez, que había abierto la cuenta, metió el cuarto.
Como una aplanadora, llevándose todo por delante, Urruti no tuvo piedad del equipo santafesino y estampó el quinto. Una diferencia abismal entre el ya descendido y el máximo candidato al título. Así, Newell's está muy próximo a su objetivo. De dar la vuelta. Tata cerquita...
Por lo general, la neblina suele confundir a los inmersos en ella. Se hace complicado ver el camino, encontrar una salida. Aunque en Rosario, con este fenómeno meteorológico presente, Newell’s sí consiguió la brújula para demoler a Unión, ya descendido. Lo venció con suma claridad, por 5-0 para seguir como único líder en el Final. A dos fechas para la conclusión, es pura ilusión. Y ganando un partido (le quedan Atlético Rafaela y Argentinos), se asegura el primer puesto.
Durante los primeros minutos, a la Lepra le costó encontrarle la vuelta al partido. El Tatengue, pese a no jugar por nada, se mostraba como un rival duro, al que no era fácil entrarle. Y hasta amenazaba con sus ataques. Lentamente, tras algunos minutos de duda, el equipo de Martino fue prevaleciendo. Comenzó a generar. A la par, a desperdiciar situaciones, especialmente de contra. Hasta que a los 31 minutos, tras un centro, Maxi Rodríguez, de cabeza, abrió el marcador. Y no sólo el resultado, sino también el juego. Los de Sava perdieron la calma, se desordenaron y Newell’s aprovechó para apretar el acelerador. Once más tarde, Nacho Scocco, que se había comido un claro mano a mano, amplió la diferencia.
Sin especular, tratando de aumentar aún más el marcador, el local continuó atacando en la segunda parte. Tenía hambre. Quería más. Y, fue Gabriel Heinze el que puso el tercer tanto en la noche rosarina. El Gringo, uno de los pilares de este puntero, se hizo presente en la red. Nada que hacer para Unión, un invitado a la fiesta leprosa. Un monólogo de los del Tata, que se florearon. El propio Rodríguez, que había abierto la cuenta, metió el cuarto.
Como una aplanadora, llevándose todo por delante, Urruti no tuvo piedad del equipo santafesino y estampó el quinto. Una diferencia abismal entre el ya descendido y el máximo candidato al título. Así, Newell's está muy próximo a su objetivo. De dar la vuelta. Tata cerquita...