¿Cuán cerca estamos de estar totalmente conectados en el aire?
Constanza Hola Chamy
BBC Mundo
Estado de Facebook: "Aterrizando". ¿Localización? Un avión. Y si eso no es suficiente, llame a la familia a través de su celular para contarle.
BBC Mundo
Estado de Facebook: "Aterrizando". ¿Localización? Un avión. Y si eso no es suficiente, llame a la familia a través de su celular para contarle.
Conectarse a internet, e incluso hacer llamadas a través del celular desde un avión ya es posible en la industria y pronto será masificado a nivel mundial.
Global Xpress es el resultado de un acuerdo entre la empresa fabricante de satélites Inmarsat y uno de los principales proveedores mundiales de la aviación, Honeywell, el cual proporcionará cobertura global de acceso a telefonía celular, internet y datos de manera más rápida, barata y disponible en cualquier lugar, incluso en vuelos de larga distancia.Este año se lanzará el primer satélite del plan "Gobal Xpress", el cual marcará un antes y un después en la conectividad digital aérea.
Tras el lanzamiento de tres satélites, el plan estará funcionando completamente en 2015. "Es la revolución de la industria", le dice Lida Mantzavinou, analista experta en aerolíneas comerciales de la consultora Frost & Sullivan a BBC Mundo.
Pero Global Xpress sólo vendrá a consolidar –y, probablemente masificar- una tendencia que va en aumento: la de la conectividad 24/7. Incluso en el avión.
Empresas como Gogo en Estados Unidos y OnAir en Europa ya proveen el acceso en varias de las aerolíneas líderes del mercado como American Airlines, British Airways, Emirates y TAM.
Y pronto se sumará Iberia, con la que la conexión, además de transocéanica también llegará a Latinoamérica.
Internet ya no será un lujo de primera clase o ejecutiva.
Internet en las nubes
Los primeros aviones con internet aparecieron en el año 2003, con la iniciativa "Connexion by Boeing" lanzada por la fabricante de aeronaves.
Sin embargo, el floreciente negocio se fue rápidamente cuesta abajo con los coletazos económicos que sufrió la industria aérea a mediados de la década pasada, como consecuencia a la caída de la demanda tras los ataques del 11S. Y el proyecto llegó a su fin en 2006.
Pero con el auge de los teléfonos y dispositivos móviles, el Wi-Fi aéreo se ha vuelto nuevamente popular.
Uno de los primeros en desarrollar este modelo fue Gogo, en Estados Unidos.
Hoy es el proveedor más popular de ese país, con distribución a más de 6.000 aviones de las principales aerolíneas norteamericanas: Air Tran, Alaska Airlines, American Airlines, Delta, Frontier, United, US Airways y Virgin America, entre otras.
Gogo funciona con una tecnología denominada "Aeronave a Tierra" (ATG, según sus siglas en inglés), las cuales utilizan estaciones de base de telefonía móvil para proveer el servicio mientras el avión vuela sobre tierra.
Sin embargo, por ahora su cobertura se limita a aeronaves que vuelen sobre tierra, y aun están trabajando duro para captar clientes.
Las tarifas van desde un pase diario por US$14 hasta internet ilimitada por US$34 mensuales. "La calidad aun no se condice con el precio", asegura Mantzavinou.
Sin embargo, el plan de negocios tiene potencial. "Para el viajero común, lo ideal será que la conectividad sea 'parte del paquete' y al comprar el pasaje entre seguro, auto y hotel pueda también tickear 'conectividad'", le dice Mantzavinou a BBC Mundo.
Sobre el aire y más allá
Tras la implementación de Global Xpress, la velocidad de banda aumentará a entre 38 y 50 Mbps para bajar datos y entre 3 y 4,7 Mbps para subir, dependiendo del tipo de terminal.
No es seguro que se utilice la velocidad al máximo, pero ya el objetivo más realista de 10Mbps sería entre 10 y 20 veces más rápido que la velocidad implementada hoy.
En Europa el tema ha ido un paso más allá con la firma OnAir.
La compañía provee no sólo internet vía Wi-Fi, sino también acceso telefónico celular, a través del GSM.
El sistema funciona de la siguiente manera: Los pasajeros utilizan sus teléfonos móviles tal como lo hacen en tierra firme, la señal es recogida por una estación de base y procesada por el servidor de GSM a bordo. Finalmente la señal se transmite vía satélite hasta que una antena terrestre de GSM procesa la señal y dirige el tráfico a su destino.
"El 80% de la gente elige tener conexión en su móvil por sobre Wi-Fi. Nosotros proveemos ambas alternativas", le dice Ian Dawkins, director ejecutivo de OnAir a BBC Mundo.
A diferencia del esquema de prepago de Gogo, OnAir funciona con alianzas con las proveedoras de telefonía celular. Lo único necesario es un teléfono inteligente y acceso a roaming. "A final de mes, aparece en tu cuenta del móvil", dice Dawkins.
Actualmente OnAir cuenta con 38 aerolíneas comerciales como sus clientes. De ellas, operan en 1.000 aviones de Aeroflot, Azal, British Airways, Egypt Air, Emirates, Etihad, Hong Kong Airlines, Libyan Airlines, Omar Air, Qatar Airways, Royal Jordania, Saudia, Singapore Airlines y TAM. El resto se encuentra en proceso de desarrollo e implementación de la tecnología.
"Ya tenemos 47 A380 (el avión más grande actualmente disponible) implementados", comenta Dawkins.
Esto responde a que el principal público objetivo de estos servicios es el ejecutivo. "El pasajero frecuente, que viaja al menos dos días a las semana y transforma el avión en su oficina, necesita este servicio para trabajar. Las compañías cuyos empleados viajan están optando por acuerdos con aerolíneas que les ofrecen conectividad", explica Mantzavinou.
Iberia está a punto de lanzar acceso a internet y mensajes de texto para sus 14 destinos en Latinoamérica.
Latinoamérica en la mira
Actualmente, la única aerolínea latinoamericana que cuenta con esa tecnología implementada es TAM.
En el resto de Latinoamérica OnAir todavía se encuentra seleccionando el proveedor de conectividad.
"Iberia lo va a lanzar bastante luego", cuenta Dawkins.
Consultados por BBC Mundo, Iberia confirmó que están trabajando en la implementación de un plan de acceso a Wi-Fi y mensajería GSM para varios tramos de mediano y largo alcance, los que incluirán los 14 destinos en Latinoamérica.