Brindisi: “Ninguno falló a la hora de la entrega"
Buenos Aires, Clarin
Una vez consumada la derrota de Independiente ante River, Miguel Ángel Brindisi enfrentó los micrófonos y defendió a sus dirigidos. Sin decirlo con palabras, el entrenador dio a entender que sólo un milagro los salvará de descender a la B Nacional, aunque evitó echar culpas a quienes llevaron al club a esta crisis deportiva.
“El equipo trató de jugar y de abrir la cancha. Fue un partido de fútbol absolutamente abierto. La derrota complica mucho mas las cosas”, fue el primer análisis del técnico en conferencia de prensa, para luego tocar el tema del descenso: “Uno tiene que hablar con la realidad, por más que sea cruda. Hay un gran margen de riesgo, la posibilidad se achicó, pero no vamos a bajar los brazos, eso es seguro”.
Brindisi no criticó al plantel en ningún momento, pese al flojo rendimiento que mostraron en el Monumental. “Siempre les digo lo mismo. Uno puede quedar mal si se guardó algo, pero ellos entregaron todo, desde el de más experiencia hasta al más joven. Me siento orgulloso de ellos”, subrayó el DT, que consideró que los jugadores “demostraron que son hombres”. Sin embargo, aclaró: “Por más que destaque la personalidad de ellos, no puedo estar conforme con el resultado”.
A modo de reflexión, el entrenador consideró que los próximos días del club marcarán “una etapa de mucho análisis, de cosas para corregir, no desde la pelea sino desde el análisis.”, y remarcó: “Las cosas que se hicieron mal antes no las sé. Ahora tengo un equipo de chicos y de gente de experiencia a los que no tengo absolutamente nada que decirles”.
Finalmente, Brindisi recordó lo que vivió River cuando perdió la Promoción ante Belgrano en 2011, una situación totalmente opuesta a la que vive hoy: “Este mismo lugar, hace un año y medio, era una tragedia, y sin embargo los jugadores volvieron a la categoría y hoy ostentan la posibilidad de ser campeones”. El DT consideró que el momento de Independiente “no es un final, es un dolor, y los dolores hay que tenerlos”, y cerró: “Hasta el último instante vamos a estar enteros, del primero al último y con la cabeza bien arriba, porque ninguno falló a la hora de la entrega”.
Una vez consumada la derrota de Independiente ante River, Miguel Ángel Brindisi enfrentó los micrófonos y defendió a sus dirigidos. Sin decirlo con palabras, el entrenador dio a entender que sólo un milagro los salvará de descender a la B Nacional, aunque evitó echar culpas a quienes llevaron al club a esta crisis deportiva.
“El equipo trató de jugar y de abrir la cancha. Fue un partido de fútbol absolutamente abierto. La derrota complica mucho mas las cosas”, fue el primer análisis del técnico en conferencia de prensa, para luego tocar el tema del descenso: “Uno tiene que hablar con la realidad, por más que sea cruda. Hay un gran margen de riesgo, la posibilidad se achicó, pero no vamos a bajar los brazos, eso es seguro”.
Brindisi no criticó al plantel en ningún momento, pese al flojo rendimiento que mostraron en el Monumental. “Siempre les digo lo mismo. Uno puede quedar mal si se guardó algo, pero ellos entregaron todo, desde el de más experiencia hasta al más joven. Me siento orgulloso de ellos”, subrayó el DT, que consideró que los jugadores “demostraron que son hombres”. Sin embargo, aclaró: “Por más que destaque la personalidad de ellos, no puedo estar conforme con el resultado”.
A modo de reflexión, el entrenador consideró que los próximos días del club marcarán “una etapa de mucho análisis, de cosas para corregir, no desde la pelea sino desde el análisis.”, y remarcó: “Las cosas que se hicieron mal antes no las sé. Ahora tengo un equipo de chicos y de gente de experiencia a los que no tengo absolutamente nada que decirles”.
Finalmente, Brindisi recordó lo que vivió River cuando perdió la Promoción ante Belgrano en 2011, una situación totalmente opuesta a la que vive hoy: “Este mismo lugar, hace un año y medio, era una tragedia, y sin embargo los jugadores volvieron a la categoría y hoy ostentan la posibilidad de ser campeones”. El DT consideró que el momento de Independiente “no es un final, es un dolor, y los dolores hay que tenerlos”, y cerró: “Hasta el último instante vamos a estar enteros, del primero al último y con la cabeza bien arriba, porque ninguno falló a la hora de la entrega”.