Teherán asegura que sus instalaciones nucleares están protegidas ante terremotos y ciberataques
Ginebra, EP
El responsabel de Protección Medioambiental del régimen iraní, Mohamad-Javad Mohamadizadé, ha asegurado este viernes que todas las instalaciones nucleares e hidroeléctricas de su país están suficientemente protegidas frente a amenazas como un terremoto o un ciberataque.
El único reactor nuclear de la central de Bushehr superó sin daños el paso de un potente terremoto que provocó la muerte de 37 personas y dejó más de 850 heridos el pasado mes de abril en Irán. Sin embargo, no han cesado las especulaciones desde otros países sobre la posibilidad de que la central nuclear esté en una zona de riesgo, especialmente desde que la Agencia iraní de la Energía Atómica anunció poco después del seísmo que construirá más reactores allí.
Dos 'think-tanks' estadounidenses, el Carnegie Endowment y la Federación de Científicos Americanos había advertido antes del terremoto de que las alertas sobre el riesgo de terremotos habían llegado a "oídos sordos".
"La mayoría de las instalaciones productoras de energía, incluidas las plantas hidroeléctricas e incluso las nucleares, cumplen el mínimo de resistencia de ocho y hasta cerca de diez en la resistencia a terremotos según las magnitudes de escala de Richter", ha asegurado Mohamadizadé, en una entrevista concedida a Reuters en la misión diplomática iraní en Ginebra.
"Los mayores niveles conocidos de seguridad y de estándares medioambientales siempre se han respetado siempre y han sido incorporados en el proceso de construcción", ha explicado Mohamadizadé, que también es vicepresidente para Asuntos Medioambientales de Irán.
"En algunos embalses tenemos unos 3.000 millones de metros cúbicos de agua. Imagínese qué tipo de catástrofe podría causar un vertido o la destrucción del embalse", ha subrayado. Mohamadizadé ha hecho hincapié en que las infraestructuras nucleares e hidroeléctricas también están preparadas para resistir ataques cibernéticos.
La central de enriquecimiento de uranio de Natanz fue la primera infraestructura que sufrió el ataque de un virus informático, el virus Stuxnet, cuya autoría se ha atribuido a Estados Unidos e Israel y que fue descubierto en 2010.
"Obviamente, nosotros hemos gestionado muy bien para protegernos de ciberataques así no sólo en instalaciones nucleares sino en instalaciones de producción de energía nuclear, hidroeléctricas y de petróleo y de gas, así como la red bancaria. Hemos protegido muy bien nuestros sistemas y nuestra información", ha subrayado.
El responsabel de Protección Medioambiental del régimen iraní, Mohamad-Javad Mohamadizadé, ha asegurado este viernes que todas las instalaciones nucleares e hidroeléctricas de su país están suficientemente protegidas frente a amenazas como un terremoto o un ciberataque.
El único reactor nuclear de la central de Bushehr superó sin daños el paso de un potente terremoto que provocó la muerte de 37 personas y dejó más de 850 heridos el pasado mes de abril en Irán. Sin embargo, no han cesado las especulaciones desde otros países sobre la posibilidad de que la central nuclear esté en una zona de riesgo, especialmente desde que la Agencia iraní de la Energía Atómica anunció poco después del seísmo que construirá más reactores allí.
Dos 'think-tanks' estadounidenses, el Carnegie Endowment y la Federación de Científicos Americanos había advertido antes del terremoto de que las alertas sobre el riesgo de terremotos habían llegado a "oídos sordos".
"La mayoría de las instalaciones productoras de energía, incluidas las plantas hidroeléctricas e incluso las nucleares, cumplen el mínimo de resistencia de ocho y hasta cerca de diez en la resistencia a terremotos según las magnitudes de escala de Richter", ha asegurado Mohamadizadé, en una entrevista concedida a Reuters en la misión diplomática iraní en Ginebra.
"Los mayores niveles conocidos de seguridad y de estándares medioambientales siempre se han respetado siempre y han sido incorporados en el proceso de construcción", ha explicado Mohamadizadé, que también es vicepresidente para Asuntos Medioambientales de Irán.
"En algunos embalses tenemos unos 3.000 millones de metros cúbicos de agua. Imagínese qué tipo de catástrofe podría causar un vertido o la destrucción del embalse", ha subrayado. Mohamadizadé ha hecho hincapié en que las infraestructuras nucleares e hidroeléctricas también están preparadas para resistir ataques cibernéticos.
La central de enriquecimiento de uranio de Natanz fue la primera infraestructura que sufrió el ataque de un virus informático, el virus Stuxnet, cuya autoría se ha atribuido a Estados Unidos e Israel y que fue descubierto en 2010.
"Obviamente, nosotros hemos gestionado muy bien para protegernos de ciberataques así no sólo en instalaciones nucleares sino en instalaciones de producción de energía nuclear, hidroeléctricas y de petróleo y de gas, así como la red bancaria. Hemos protegido muy bien nuestros sistemas y nuestra información", ha subrayado.