La posible vuelta a la política de Aznar enciende el debate
MADRID, AFP
La posibilidad de que José María Aznar, jefe del Gobierno entre 1996 y 2004, vuelva a la política encendió el debate este miércoles en España, donde la izquierda veía un reproche al actual gobierno mientras una parte de la derecha tomó distancias.
En una entrevista televisiva emitida el martes por la noche, Aznar lanzó duras críticas al actual presidente del Ejecutivo, Mariano Rajoy, a quien él mismo nombró como su sucesor, pidiéndole que baje los impuestos y cumpla sus promesas electorales.
Esta irrupción de Aznar, apartado de la primera línea política durante mucho tiempo pero aún muy influyente entre algunos círculos de la derecha, fue interpretado por muchos como un anuncio de su posible retorno. "Nunca he eludido mi responsabilidad, cumpliré con mi responsabilidad, mi conciencia, mi partido y mi país", había dicho en la cadena de televisión privada Antena 3.
La posibilidad de que José María Aznar, jefe del Gobierno entre 1996 y 2004, vuelva a la política encendió el debate este miércoles en España, donde la izquierda veía un reproche al actual gobierno mientras una parte de la derecha tomó distancias.
En una entrevista televisiva emitida el martes por la noche, Aznar lanzó duras críticas al actual presidente del Ejecutivo, Mariano Rajoy, a quien él mismo nombró como su sucesor, pidiéndole que baje los impuestos y cumpla sus promesas electorales.
Esta irrupción de Aznar, apartado de la primera línea política durante mucho tiempo pero aún muy influyente entre algunos círculos de la derecha, fue interpretado por muchos como un anuncio de su posible retorno. "Nunca he eludido mi responsabilidad, cumpliré con mi responsabilidad, mi conciencia, mi partido y mi país", había dicho en la cadena de televisión privada Antena 3.
La portavoz del grupo socialista en el Congreso de los Diputados, Soraya Rodríguez, acusó este miércoles al Ejecutivo de Rajoy de no escuchar "ni a la oposición, ni a la sociedad", ni "a su propio partido", donde, dijo, "las críticas son cada vez más y más abiertas".
Presidente de honor del Partido Popular, Aznar insistió en "la necesidad de bajar los impuestos ahora". Desde su llegada al poder a finales de 2011, el Gobierno español ha aumentado la fiscalidad en el marco de su programa de austeridad. "El proceso de castigo a las clases medias está siendo muy fuerte", dijo Aznar, recordando que "el PP en 1998 hizo una reforma fiscal y bajó los impuestos con muy buenos resultados".
Entre las filas de la derecha estas declaraciones despertaron dudas. "Hay cosas que tuvieron su momento. Podemos estar muy orgullosos de aquella etapa (los años del gobierno de Aznar), pero las cosas se van para no volver", comentó el presidente del Congreso de los Diputados, Jesús Posada. El ministro de Hacienda, Cristóbal Montoro, que ocupaba el mismo cargo en la época de Aznar, salió al paso para defender el actual rigor económico en un contexto de recesión y con un desempleo del 27,16%. "La añoranza melancólica me la dejo para otro día", aseveró Montoro. "Eran tiempos en donde la economía crecía al 4% o al 3%. Ahora estamos cayendo. Formalmente vamos a caer este año el 1,4% y estamos, por tanto, haciendo una política tributaria que no lleve a mayor déficit o incluso a no poder sufragar realmente el pago de prestaciones sociales básicas", defendió.
Aznar, que sucedió al socialista Felipe González, llegó al poder en 1996 en un momento en que España registraba un desempleo del 22%. En sus dos legislaturas sucesivas llevó a cabo una política liberal con la que consiguió reducir el paro al 10% en 2004 y disparar el crecimiento económico, aunque al mismo tiempo se gestó la burbuja inmobiliaria cuyo pinchazo en 2008 provocó la crisis.
Pero los escándalos de corrupción que estallaron después sembraron sospechas sobre varios de sus allegados, en particular el 'caso Gürtel', una presunta trama corrupta ligada a la financiación de la derecha española mediante donaciones de empresas, que la justicia investiga desde 2009.
El martes, el diario El País afirmaba que la 'trama Gürtel' financió, en 32.000 euros, una parte de la boda de la hija de Aznar, Ana. La ceremonia, el 5 de septiembre de 2002 en el suntuoso escenario del monasterio de El Escorial, cerca de Madrid, había reunido a personalidades españolas y extranjeras, entre ellas Tony Blair y Silvio Berlusconi. "Esa es una mala información. Parece bastante normal que los invitados a una boda hagan regalos a los contrayentes", se defendió el ex jefe de gobierno durante la entrevista.
Tras una segunda legislatura muy controvertida, especialmente por su apoyo a la guerra de Irak , Aznar cedió el poder en 2004 al socialista José Luis Rodríguez Zapatero, siendo sancionado por los electores por haber atribuido al grupo armado vasco ETA los atentados islamistas de Madrid, que causaron 191 muertos el 11 de marzo de 2004.