Cientos de chiíes se enfrentan a la Policía por el registro de la casa de un clérigo en Bahréin
Londres, EP
Cientos de chiíes enfurecidos por el registro la semana pasada de la residencia de un importante clérigo se han enfrentado este viernes con la Policía, mientras que miles más se han congregado en la localidad del religioso para una sentada pacífica contra el Gobierno de la isla, gobernada por una familia real suní.
El registro por las fuerzas de seguridad de la vivienda del ayatolá jeque Issa Qassim el 17 de mayo enfureció a la oposición y provocó condenas en el vecino Irán, un país mayoritariamente chií. La isla registró importantes protestas en 2011 tras la estela de las ocurridas en otros países en la llamada 'Primavera árabe' pero fueron aplastadas con apoyo de los países vecinos.
Desde entonces, se han producido repetidas protestas, menos multitudinarias, encabezadas por la mayoría chií del país, que quieren que la familia gobernante de los Al Jalifa, suníes, convoque elecciones y creen una monarquía constitucional.
El registro de la residencia del ayatolá hizo que el principal partido opositor, Wefaq, anunciara este miércoles que se reiteraría de las conversaciones de reconciliación con el Gobierno durante dos semanas.
Los manifestantes en la localidad de Diraz, al oeste de Manama, la capital, han lanzado piedras contra cientos de agentes antidisturbios que respondieron con gases lacrimógenos y cañones de agua, según un testigo. Los incidentes continuaron durante más de una hora antes de que los manifestantes se dispersaran, según el testigo.
Los manifestantes en la sentada, convocada por Wefaq y autorizada por el Gobierno, enarbolaron banderas bahreiníes y portaban imágenes del jeque Issa.
La Policía ha señalado que el registro de la vivienda del clérigo se produjo durante una operación de seguridad en el mismo barrio y no era el objetivo principal.
Cientos de chiíes enfurecidos por el registro la semana pasada de la residencia de un importante clérigo se han enfrentado este viernes con la Policía, mientras que miles más se han congregado en la localidad del religioso para una sentada pacífica contra el Gobierno de la isla, gobernada por una familia real suní.
El registro por las fuerzas de seguridad de la vivienda del ayatolá jeque Issa Qassim el 17 de mayo enfureció a la oposición y provocó condenas en el vecino Irán, un país mayoritariamente chií. La isla registró importantes protestas en 2011 tras la estela de las ocurridas en otros países en la llamada 'Primavera árabe' pero fueron aplastadas con apoyo de los países vecinos.
Desde entonces, se han producido repetidas protestas, menos multitudinarias, encabezadas por la mayoría chií del país, que quieren que la familia gobernante de los Al Jalifa, suníes, convoque elecciones y creen una monarquía constitucional.
El registro de la residencia del ayatolá hizo que el principal partido opositor, Wefaq, anunciara este miércoles que se reiteraría de las conversaciones de reconciliación con el Gobierno durante dos semanas.
Los manifestantes en la localidad de Diraz, al oeste de Manama, la capital, han lanzado piedras contra cientos de agentes antidisturbios que respondieron con gases lacrimógenos y cañones de agua, según un testigo. Los incidentes continuaron durante más de una hora antes de que los manifestantes se dispersaran, según el testigo.
Los manifestantes en la sentada, convocada por Wefaq y autorizada por el Gobierno, enarbolaron banderas bahreiníes y portaban imágenes del jeque Issa.
La Policía ha señalado que el registro de la vivienda del clérigo se produjo durante una operación de seguridad en el mismo barrio y no era el objetivo principal.
