Un perro fue sacrificado luego de que su dueña pidiera que lo enterraran junto a ella
Caracas, Noticias24
Una mujer ciega de 68 años, solicitó que al morir fuera enterrada junto a su saludable perro de cinco años de edad, el cual fue sacrificado 5 días después de su muerte.
Shelia Stadler no podía separarse de su mascota, un perro de pocos años de edad que la acompañó incondicionalmente hasta más allá de la muerte. Toffee, nombre de la mascota, fue sacrificado por los familiares de Stadler luego que ella muriera el pasado 8 de marzo tras un cáncer que padecía desde hace algún tiempo.
Según las declaraciones de los familiares de Stadler, el perro mostró una “notable” tristeza al ver morir a su dueña y tenía signos de “luto”, por lo que tomaron la decisión de sacrificar al perro para hacer cumplir al última voluntad de la fallecida.
Gregory Reilly, un asistente en medicina veterinaria indicó que el caso era “inusual en algunos aspectos”, aunque agregó que “era decisión” de los dueños “qué hacer con el perro”. “Legalmente pueden hacer lo que quieren”, añadió.
Andy, uno de los hijos de Stadler, dijo que Toffee “vagó sin rumbo en los días posteriores a la muerte de mi madre. Yo no diría que es raro que un perro pueda estar de luto, especialmente si está muy cerca de una persona”.
Una mujer ciega de 68 años, solicitó que al morir fuera enterrada junto a su saludable perro de cinco años de edad, el cual fue sacrificado 5 días después de su muerte.
Shelia Stadler no podía separarse de su mascota, un perro de pocos años de edad que la acompañó incondicionalmente hasta más allá de la muerte. Toffee, nombre de la mascota, fue sacrificado por los familiares de Stadler luego que ella muriera el pasado 8 de marzo tras un cáncer que padecía desde hace algún tiempo.
Según las declaraciones de los familiares de Stadler, el perro mostró una “notable” tristeza al ver morir a su dueña y tenía signos de “luto”, por lo que tomaron la decisión de sacrificar al perro para hacer cumplir al última voluntad de la fallecida.
Gregory Reilly, un asistente en medicina veterinaria indicó que el caso era “inusual en algunos aspectos”, aunque agregó que “era decisión” de los dueños “qué hacer con el perro”. “Legalmente pueden hacer lo que quieren”, añadió.
Andy, uno de los hijos de Stadler, dijo que Toffee “vagó sin rumbo en los días posteriores a la muerte de mi madre. Yo no diría que es raro que un perro pueda estar de luto, especialmente si está muy cerca de una persona”.