The Cure hace temblar a la Ciudad de México
MúsicaHasta la Madre Naturaleza se emocionó ante el concierto de la legendaria banda The Cure, pues unos minutos antes de que Robert Smith y compañía hicieran su aparición en el escenario del Foro Sol de la Ciudad de México, un sismo se sintió. Imperceptible para algunos, origen de los nervios de otros, pero que no logró desaparecer el ánimo de los presentes.
Pasadas las 20:30 hrs. al fin fue momento para que The Cure hiciera acto de presencia luego de más de 5 años de ausencia en la Ciudad.
La música dio inicio con "Open", "High" y "The End of
the World" que comenzó a calentar los motores de los presentes que se inundaron de energía cuando sonaron los primeros acordes de "Lovesong". Minutos más tarde "Just Like Heaven" y un monumental coro se esparció en el recinto: "¡Es por la que vine, ya puedo morir tranquilo!", gritó un emocionado muchacho que sin embargo no se imaginaba que aún faltaban más de 40 canciones por escuchar.
El kilométrico show consiguió que los seguidores pudieran escuchar al menos una probadita de la larga discografía de los abanderados por Smith.
"Pictures of You", "Lullaby" y "Sleep When I'm Dead" continuaron con el encantamiento ofrecido en la velada, mientras en la pista y en las gradas la gente observaba embobada a sus ídolos. "Robert, por ti me convierto en dark", gritaba una muchacha vestida como si luego del concierto fuera a bailar a algún centro nocturno de la Ciudad, lo que demostraba la amplitud del público que reúne The Cure.
Con "Friday I'm In Love" el tímido coro seguía participando, mientras que "Trust" y "Want" generaban el vaivén de los asistentes, que se encendían con la simple comunicación de Robert Smith quien de repente sólo decía "gracias".
Llegó una de las muchas pausas de la noche luego de "End", pero The Cure quiso ofrecer más música: "The Kiss", "If Only Tonight" y "Fight" parecían ponerle fin al show, y el público acostumbrado a un solo encore comenzaba a enfilarse a la salida, sin embargo la banda regresó con "Plainsong" y "Disintegration", ante la algarabía de los fieles fans que soportaban la larga duración del concierto.
Todavía hubo tiempo para un tercer y un cuarto encore en el que desfilaron cortes como "A Strange Day", "Fascination Street", "The Lovecats", "Close to Me" y "Fire in Cairo", en la cual Robert Smith lució su peculiar talento vocal.
El broche de oro llegó cuando la banda entonó "Boys Don't Cry" y "Killing an Arab", tras la cual al fin la agrupación se despidió: "Gracias, esperamos verlos pronto...".
