Gobierno no reconoce error en la presentación de Adao Silva como sicario
La Paz, Radio Fides
El viceministro de Régimen Interior, Jorge Pérez justificó la presentación de Adao Souza como el presunto sicario de Honorio Rodríguez, aseguró que una serie de hechos lo señalaban como uno de los principales sospechosos de este asesinato lo que obligó a las autoridades a presentarlo como el autor de un crimen que finalmente se comprobó que no cometió.
“La presentación del ciudadano Adao ha respondido al trabajo integral de investigación que desarrolla la Policía Boliviana porque la Policía lo que hace es conseguir evidencias, buscar sospechosos y entregarlos a las entida
des pertinentes para que valoren esa evidencia de investigación que consigue”, dijo Pérez en conferencia de prensa.
La autoridad aseguró que no se trata de “una cacería de brujas” sino de una investigación profesional de la Policía que determinó que había varios indicios que indicaban que el ciudadano brasileño podía ser responsable de la muerte de Rodríguez.
Estos indicios, según la explicación de Pérez, eran los antecedentes penales de Souza, que acababa de salir de la cárcel, la existencia de una persona que lo acuso como responsable del hecho, y tercero que tuvo suficiente tiempo para ir hasta el lugar del crimen, cambiarse de ropa y ejecutar el asesinato a pesar que se lo había visto haciendo algunos trámites.
“Todos esos elementos fueron valorados, había una sensación social importante y hay que valorar que entre la sensación de miedo social y la valoración del hecho sangriento, frío cruel que se perpetró contra el señor Honorio y los indicios, si lo da a conocer a la población o no y los debe dar a conocer, esa es la obligación de la Policía y el Ministerio de Gobierno”, dijo.
Para Pérez “no se trata de mirar el pelo en la leche” sino mirar lo más importante y en este caso es que se encontró al verdadero culpable y se lo llevó tras las rejas “nos pueden cuestionar de cualquier cosa” dijo menos de que se haya declarado la guerra a la delincuencia y pidió que en ese marco se confíe en su trabajo y en el de la Policía.
El viceministro de Régimen Interior, Jorge Pérez justificó la presentación de Adao Souza como el presunto sicario de Honorio Rodríguez, aseguró que una serie de hechos lo señalaban como uno de los principales sospechosos de este asesinato lo que obligó a las autoridades a presentarlo como el autor de un crimen que finalmente se comprobó que no cometió.
“La presentación del ciudadano Adao ha respondido al trabajo integral de investigación que desarrolla la Policía Boliviana porque la Policía lo que hace es conseguir evidencias, buscar sospechosos y entregarlos a las entida
des pertinentes para que valoren esa evidencia de investigación que consigue”, dijo Pérez en conferencia de prensa.
La autoridad aseguró que no se trata de “una cacería de brujas” sino de una investigación profesional de la Policía que determinó que había varios indicios que indicaban que el ciudadano brasileño podía ser responsable de la muerte de Rodríguez.
Estos indicios, según la explicación de Pérez, eran los antecedentes penales de Souza, que acababa de salir de la cárcel, la existencia de una persona que lo acuso como responsable del hecho, y tercero que tuvo suficiente tiempo para ir hasta el lugar del crimen, cambiarse de ropa y ejecutar el asesinato a pesar que se lo había visto haciendo algunos trámites.
“Todos esos elementos fueron valorados, había una sensación social importante y hay que valorar que entre la sensación de miedo social y la valoración del hecho sangriento, frío cruel que se perpetró contra el señor Honorio y los indicios, si lo da a conocer a la población o no y los debe dar a conocer, esa es la obligación de la Policía y el Ministerio de Gobierno”, dijo.
Para Pérez “no se trata de mirar el pelo en la leche” sino mirar lo más importante y en este caso es que se encontró al verdadero culpable y se lo llevó tras las rejas “nos pueden cuestionar de cualquier cosa” dijo menos de que se haya declarado la guerra a la delincuencia y pidió que en ese marco se confíe en su trabajo y en el de la Policía.