Carlos Valverde dice que fiscal Soza extorsionaba a implicados en el caso terrorismo
Santa Cruz, ANFEl periodista cruceño Carlos Valverde reveló que el fiscal del caso terrorismo, Marcelo Soza habría recibido al menos cuatro millones de dólares en la ciudad de Buenos Aires, Argentina, por parte de familiares de los procesados en este caso para favorecerlos.
Según Valverde los montos de dinero recibidos por el fiscal Soza tenía la finalidad de bajar las penas a los sindicados dentro el proceso a través de las imputaciones realizadas por el Ministerio Público. Además dentro estos hechos de extorsión estarían implicados los abogados Carlos Subirana y Luis Clavijo (exdirector de Régimen Interior del Ministerio de Gobierno).
“Yo sé de muy buena fuente que en Buenos Aires (Argentina) corrieron cuatro millones y medio de dólares, pagando digamos en paquetes (… ) Lo que pasa es mucha gente se está olvidando del audio, el audio es verdadero; ahora lo que habrá que definir es, si Soza va sólo por su lado”, sostuvo Valverde en una entrevista con la red Gigavisión.
El periodista, quien también escribió un libro sobre este caso, sostuvo que Zvonko Matkovic, acusado en el caso terrorismo, entregó en mayo de 2010 la suma de 150 mil dólares a Soza en el domicilio de una ciudadana de nombre Ana Claudia R, supuestamente en esa vivienda también se pagó aproximadamente 400 mil dólares por parte de otros implicados.
En respuesta a las recientes denuncias que presentó Valverde, el abogado de varios implicados Carlos Subirana respondió señalando que el periodista cruceño tenía relación con el exfuncionario del ministerio de Gobierno, Luis Clavijo
“Yo dije que Valverde era delator, agente de la gente de Clavijo y dije que se reunieron 12 veces. Valverde fue metido a la cárcel por la ley mil ocho por el caso de la narcoestatuilla, él reconoce que estuvo preso en Chonchocoro, Carlos Valverde miente y yo digo la vedad y me remito a los hechos”, dijo el abogado.
Subirana también reconoció tener una amistad con el exdirector de Régimen Interior, con quien se hizo amigo en un juicio que hubo contra una persona a quien evitó citar para “no revictimizarla”.
