El Papa quiere una "Iglesia pobre y para los pobres"
Ciudad del vaticano, Reuters
El Papa Francisco, en su más clara indicación hasta el momento de que quiere una Iglesia católica más austera, dijo el sábado que ésta debería ser pobre y recuerda que su misión es servir a los pobres.
El Pontífice, hablando en gran parte de forma improvisada y sonriendo a menudo, hizo sus declaraciones en una audiencia con los periodistas, donde explicó por qué eligió tomar el nombre de Francisco, por el santo Francisco de Asís, un símbolo de paz, austeridad y pobreza.
Él se refirió a Francisco como "el hombre que nos da el espíritu de la paz, el hombre pobre", y añadió "¡Oh, cómo me gustaría una Iglesia pobre, y para los pobres!".
Desde que fue elegido el miércoles como el primer Papa no europeo en casi 1.300 años, Francisco ha dado señales de un radical cambio de estilo respecto a su antecesor, Benedicto, y ha trazado un camino claro para la moral de la Iglesia compuesta por 1.200 millones de miembros, acosada por escándalos, intrigas y luchas.
Agradeció a los miles de periodistas que habían cubierto su elección pero los invitó a "intentar siempre entender la verdadera naturaleza de la Iglesia, e incluso su andadura por el mundo, con sus virtudes y sus pecados".
Instó a los periodistas a enfocarse en la "verdad, la bondad y la belleza" en el mundo y en la Iglesia.
Francisco ha establecido un tono moral enérgico y ha dado ya claras señales de que trae un nuevo estilo al papado golpeado por la crisis, fomentando la humildad y la simplicidad por encima del boato y la grandeza.
Recordó que en la noche del miércoles, cuando estaba recibiendo cada vez más votos del cónclave, el cardenal sentado a su lado, el brasileño Claudio Hummes, lo consoló cuando "la situación se volvió peligrosa".
Después de que la votación alcanzase la mayoría de dos tercios para su elección, estallaron los aplausos. Hummes, de 78 años, lo abrazó y lo besó y le dijo: "No te olvides de los pobres", recordó el Papa, gesticulando con las manos a menudo.
"Esas palabras entraron aquí", dijo señalando a su cabeza.
Aunque la votación formal continuó, el Papa recordó: "Pensé en las guerras... y en Francisco (de Asís) el hombre de la paz. Y así es como el nombre entró en mi corazón, Francisco de Asís, para mí es el hombre de la pobreza, el hombre de la paz, el hombre que ama y protege a los demás".
Esa fue la última indicación de que el Papa quiere que la Iglesia en todo el mundo asuma un estilo austero.
La noche de su elección, eludió la limusina papal y viajó en un autobús con otros cardenales que lo habían elegido. El día siguiente regresó al hotel eclesiástico donde había estado alojado antes del cónclave e insistió en pagar la cuenta.
En otras partes de sus declaraciones en italiano, en gran parte improvisadas, dijo que los católicos deberían recordar que Jesús es el centro de la Iglesia y no el Papa.
Francisco, el antiguo cardenal Jorge Bergoglio, también ha instado a los argentinos a no hacer costosos viajes a Roma para verlo, y a cambio que den el dinero a los pobres.
RESPETAR LA NATURALEZA
San Francisco de Asís, que murió en 1226, renunció a su fortuna familiar para una vida de caridad y pobreza y también es reverenciado por los ecologistas porque amaba la naturaleza y predicó a los animales.
"En este momento, no tenemos una relación muy buena con la creación", dijo el Papa.
Dijo que los católicos deberían recordar que Jesús, no el Papa, era el centro de la Iglesia. Al final de su discurso, cambió del italiano al español, y también hizo un gesto a los no creyentes y a los miembros de otras religiones.
"De buen grado le daré un bendición. Ya que muchos de ustedes no pertenecen a la Iglesia católica y otros no son creyentes, desde el fondo de mi corazón les doy una silenciosa bendición a todos y cada uno de ustedes, respetando la conciencia de cada uno, pero a sabiendas de que cada uno de ustedes es un hijo de Dios. ¡Qué Dios los bendiga a todos ustedes!".
El Papa Francisco, en su más clara indicación hasta el momento de que quiere una Iglesia católica más austera, dijo el sábado que ésta debería ser pobre y recuerda que su misión es servir a los pobres.
El Pontífice, hablando en gran parte de forma improvisada y sonriendo a menudo, hizo sus declaraciones en una audiencia con los periodistas, donde explicó por qué eligió tomar el nombre de Francisco, por el santo Francisco de Asís, un símbolo de paz, austeridad y pobreza.
Él se refirió a Francisco como "el hombre que nos da el espíritu de la paz, el hombre pobre", y añadió "¡Oh, cómo me gustaría una Iglesia pobre, y para los pobres!".
Desde que fue elegido el miércoles como el primer Papa no europeo en casi 1.300 años, Francisco ha dado señales de un radical cambio de estilo respecto a su antecesor, Benedicto, y ha trazado un camino claro para la moral de la Iglesia compuesta por 1.200 millones de miembros, acosada por escándalos, intrigas y luchas.
Agradeció a los miles de periodistas que habían cubierto su elección pero los invitó a "intentar siempre entender la verdadera naturaleza de la Iglesia, e incluso su andadura por el mundo, con sus virtudes y sus pecados".
Instó a los periodistas a enfocarse en la "verdad, la bondad y la belleza" en el mundo y en la Iglesia.
Francisco ha establecido un tono moral enérgico y ha dado ya claras señales de que trae un nuevo estilo al papado golpeado por la crisis, fomentando la humildad y la simplicidad por encima del boato y la grandeza.
Recordó que en la noche del miércoles, cuando estaba recibiendo cada vez más votos del cónclave, el cardenal sentado a su lado, el brasileño Claudio Hummes, lo consoló cuando "la situación se volvió peligrosa".
Después de que la votación alcanzase la mayoría de dos tercios para su elección, estallaron los aplausos. Hummes, de 78 años, lo abrazó y lo besó y le dijo: "No te olvides de los pobres", recordó el Papa, gesticulando con las manos a menudo.
"Esas palabras entraron aquí", dijo señalando a su cabeza.
Aunque la votación formal continuó, el Papa recordó: "Pensé en las guerras... y en Francisco (de Asís) el hombre de la paz. Y así es como el nombre entró en mi corazón, Francisco de Asís, para mí es el hombre de la pobreza, el hombre de la paz, el hombre que ama y protege a los demás".
Esa fue la última indicación de que el Papa quiere que la Iglesia en todo el mundo asuma un estilo austero.
La noche de su elección, eludió la limusina papal y viajó en un autobús con otros cardenales que lo habían elegido. El día siguiente regresó al hotel eclesiástico donde había estado alojado antes del cónclave e insistió en pagar la cuenta.
En otras partes de sus declaraciones en italiano, en gran parte improvisadas, dijo que los católicos deberían recordar que Jesús es el centro de la Iglesia y no el Papa.
Francisco, el antiguo cardenal Jorge Bergoglio, también ha instado a los argentinos a no hacer costosos viajes a Roma para verlo, y a cambio que den el dinero a los pobres.
RESPETAR LA NATURALEZA
San Francisco de Asís, que murió en 1226, renunció a su fortuna familiar para una vida de caridad y pobreza y también es reverenciado por los ecologistas porque amaba la naturaleza y predicó a los animales.
"En este momento, no tenemos una relación muy buena con la creación", dijo el Papa.
Dijo que los católicos deberían recordar que Jesús, no el Papa, era el centro de la Iglesia. Al final de su discurso, cambió del italiano al español, y también hizo un gesto a los no creyentes y a los miembros de otras religiones.
"De buen grado le daré un bendición. Ya que muchos de ustedes no pertenecen a la Iglesia católica y otros no son creyentes, desde el fondo de mi corazón les doy una silenciosa bendición a todos y cada uno de ustedes, respetando la conciencia de cada uno, pero a sabiendas de que cada uno de ustedes es un hijo de Dios. ¡Qué Dios los bendiga a todos ustedes!".