Cientos de miles de personas marchan en París contra el matrimonio gay
Destacados líderes de la derecha y la ultraderecha francesa, entre los manifestantes
Miguel Mora
París, El País
Grupos católicos, dirigentes, alcaldes, diputados y decenas de miles de militantes de la derecha y de la ultraderecha francesa se han reunido hoy en las calles de París durante una nueva manifestación contra la ley que regula el matrimonio gay. 1,4 millones de personas, según los organizadores, y 300.000 según la policía, han recorrido las avenidas que llevan desde el barrio de la Defensa hasta el Arco del Triunfo. El eslogan de la protesta era “todos nacidos de un hombre y una mujer”.
La jefa de filas del movimiento, la humorista Frigide Barjot, ha exigido de nuevo la retirada del proyecto de ley y la convocatoria de un referéndum. La ley Taubira, llamada así por la ministra de Justicia, Christiane Taubira, se aprobó hace varias semanas en la Asamblea Nacional y ahora debe pasar el filtro del Senado y volver al Congreso antes de ser promulgada por el presidente de la República, François Hollande.
Barjot ha pedido al presidente socialista que “se ocupe de la deprimida economía francesa y deje en paz a las familias”. Los opositores, movilizados desde los obispados, las parroquias, asociaciones y partidos de inspiración católica afirman que la ley, al abrir la posibilidad de adopción a las parejas homosexuales, “cambiará completamente a la sociedad al negar la paternidad y la filiación natural”.
Los asistentes han cantado coros como “No toques el matrimonio, ocúpate del paro”, y en la movilización, que se define como apolítica, han participado destacados dirigentes de la conservadora UMP, como el presidente del partido Jean-François Copé o el diputado Henri Guaino, quien ha afirmado que la protesta de hoy “quedará para la Historia”. Junto a ellos ha desfilado una delegación del Frente Nacional, que había invitado a sus militantes a sumarse a la protesta.
Al final de la marcha se han producido algunos incidentes, cuando un grupo reducido de manifestantes ha intentado forzar los cordones policiales para desfilar por la avenida de los Campos Elíseos. La policía ha lanzado gases lacrimógenos para dispersarlos, y Copé ha censurado la actitud de las fuerzas del orden. Para Manuel Valls, el ministro del Interior, la manifestación "se les ha ido de las manos" a los organizadores, que permitieron la presencia de extremistas. Numerosas personas desbordaron las barreras policiales y recorrieron los Campos Elíseos pese a la prohibición de la policía.
Miguel Mora
París, El País
Grupos católicos, dirigentes, alcaldes, diputados y decenas de miles de militantes de la derecha y de la ultraderecha francesa se han reunido hoy en las calles de París durante una nueva manifestación contra la ley que regula el matrimonio gay. 1,4 millones de personas, según los organizadores, y 300.000 según la policía, han recorrido las avenidas que llevan desde el barrio de la Defensa hasta el Arco del Triunfo. El eslogan de la protesta era “todos nacidos de un hombre y una mujer”.
La jefa de filas del movimiento, la humorista Frigide Barjot, ha exigido de nuevo la retirada del proyecto de ley y la convocatoria de un referéndum. La ley Taubira, llamada así por la ministra de Justicia, Christiane Taubira, se aprobó hace varias semanas en la Asamblea Nacional y ahora debe pasar el filtro del Senado y volver al Congreso antes de ser promulgada por el presidente de la República, François Hollande.
Barjot ha pedido al presidente socialista que “se ocupe de la deprimida economía francesa y deje en paz a las familias”. Los opositores, movilizados desde los obispados, las parroquias, asociaciones y partidos de inspiración católica afirman que la ley, al abrir la posibilidad de adopción a las parejas homosexuales, “cambiará completamente a la sociedad al negar la paternidad y la filiación natural”.
Los asistentes han cantado coros como “No toques el matrimonio, ocúpate del paro”, y en la movilización, que se define como apolítica, han participado destacados dirigentes de la conservadora UMP, como el presidente del partido Jean-François Copé o el diputado Henri Guaino, quien ha afirmado que la protesta de hoy “quedará para la Historia”. Junto a ellos ha desfilado una delegación del Frente Nacional, que había invitado a sus militantes a sumarse a la protesta.
Al final de la marcha se han producido algunos incidentes, cuando un grupo reducido de manifestantes ha intentado forzar los cordones policiales para desfilar por la avenida de los Campos Elíseos. La policía ha lanzado gases lacrimógenos para dispersarlos, y Copé ha censurado la actitud de las fuerzas del orden. Para Manuel Valls, el ministro del Interior, la manifestación "se les ha ido de las manos" a los organizadores, que permitieron la presencia de extremistas. Numerosas personas desbordaron las barreras policiales y recorrieron los Campos Elíseos pese a la prohibición de la policía.