Bolivia retira reserva del Pacto de Bogotá y se alista para demandar a Chile
La Paz, Radio Fides
La Asamblea Legislativa Plurinacional decidió autorizar al Órgano Ejecutivo a que retire la reserva que mantiene a uno de los artículos del pacto de Bogotá y que impedía que se demande el Tratado firmado con Chile en 1904 ante el Tribunal Internacional de La Haya.
La Asamblea aprobó la eliminación de la reserva del Estado Boliviano al artículo VI del Tratado Americano de Soluciones Pacíficas suscrito el 30 de abril de 1948 sobre los procedimientos que deben realizarse para plantear una demanda internacional.
El Art. VI dice: “Tampoco podrán aplicarse dichos procedimientos a los asuntos ya resueltos por arreglo de las partes, o por laudo arbitral, o por sentencia de un tribunal internacional, o que se hallen regidos por acuerdos o tratados en vigencia en la fecha de la celebración del presente Pacto”.
El senador de Convergencia Nacional, Marcelo Antezana confirmó que la Asamblea aprobó la eliminación de la reserva y que “ahora se podrá llevar la demanda ante la Corte de La Haya”. La Asamblea sancionó por unanimidad esta norma.
“Estamos esperanzados en que esto allane el camino, es por eso que de manera unánime se ha apoyado la Ley tanto el oficialismo como la oposición, se está allanando el camino”, agregó el senador.
Habiendo acuerdo de partes es poco probable que Bolivia denuncie el Tratado de 1904 por lo que la demanda ante La Haya iría por otro lado y se refería en específico al reclamo de los derechos históricos que el país tiene sobre las que fueron sus costas.
El Acuerdo de 1948 compromete a los Estados miembros del Pacto a “abstenerse de la amenaza, del uso de la fuerza o de cualquier otro medio de coacción para el arreglo de sus controversias y en recurrir en todo tiempo a procedimientos pacíficos”.
El Pacto establece que en caso de que “entre dos o más Estados signatarios se suscite una controversia que, en opinión de las partes, no pueda ser resuelta por negociaciones directas” se pueden recurrir a procedimientos especiales de solución pacífica de conflictos, en los que figuran las demandas ante tribunales internacionales.
La Asamblea Legislativa Plurinacional decidió autorizar al Órgano Ejecutivo a que retire la reserva que mantiene a uno de los artículos del pacto de Bogotá y que impedía que se demande el Tratado firmado con Chile en 1904 ante el Tribunal Internacional de La Haya.
La Asamblea aprobó la eliminación de la reserva del Estado Boliviano al artículo VI del Tratado Americano de Soluciones Pacíficas suscrito el 30 de abril de 1948 sobre los procedimientos que deben realizarse para plantear una demanda internacional.
El Art. VI dice: “Tampoco podrán aplicarse dichos procedimientos a los asuntos ya resueltos por arreglo de las partes, o por laudo arbitral, o por sentencia de un tribunal internacional, o que se hallen regidos por acuerdos o tratados en vigencia en la fecha de la celebración del presente Pacto”.
El senador de Convergencia Nacional, Marcelo Antezana confirmó que la Asamblea aprobó la eliminación de la reserva y que “ahora se podrá llevar la demanda ante la Corte de La Haya”. La Asamblea sancionó por unanimidad esta norma.
“Estamos esperanzados en que esto allane el camino, es por eso que de manera unánime se ha apoyado la Ley tanto el oficialismo como la oposición, se está allanando el camino”, agregó el senador.
Habiendo acuerdo de partes es poco probable que Bolivia denuncie el Tratado de 1904 por lo que la demanda ante La Haya iría por otro lado y se refería en específico al reclamo de los derechos históricos que el país tiene sobre las que fueron sus costas.
El Acuerdo de 1948 compromete a los Estados miembros del Pacto a “abstenerse de la amenaza, del uso de la fuerza o de cualquier otro medio de coacción para el arreglo de sus controversias y en recurrir en todo tiempo a procedimientos pacíficos”.
El Pacto establece que en caso de que “entre dos o más Estados signatarios se suscite una controversia que, en opinión de las partes, no pueda ser resuelta por negociaciones directas” se pueden recurrir a procedimientos especiales de solución pacífica de conflictos, en los que figuran las demandas ante tribunales internacionales.