Alemania, a medio gas y sin nueve, cumple en Kazajistán
Alma Ata, EFE
Una Alemania a medio gas logró la victoria en Kazajistán (0-3), que le sirve para seguir liderando en solitario el grupo C. Joaquim Löw se mostró preocupado antes del choque por el césped artificial y el sistema defensivo kazajo. Sin embargo, sus temores se disiparon en apenas dos minutos, los que pasaron desde el 0-1 al 0-2. Después todo fue coser y cantar y el seleccionador alemán lo aprovechó para hacer diferentes probaturas. Una de ellas, jugar sin nueve puro, con Götze haciendo esa función como ya hizo en un amistoso reciente frente a Francia. El experimento le salió bien y en ningún momento tuvo problemas para sacar el encuentro adelante.
Ya desde el inicio del choque, Alemania mostró su repertorio. Como ya ensañase durante la semana, la paciencia, el toque y la movilidad fueron sus principales armas. Como si de un ataque de balonmano se tratase, los germanos movieron el balón a su antojo, de una banda a otra, con constantes apoyos y toques cortos. Así llegaron las mejores ocasiones, con un gran Draxler durante el tiempo que estuvo en el campo. Porque el extremo del Schalke tuvo que ser sustituido por Podolski. La pelota no terminaba de entrar, hasta que en dos jugadas prácticamente seguidas, primero Müller tras lanzamiento de Schweinsteiger y jugada inicial de Özil, y después Götze, tras un rechace del portero, hicieron el 0-2. Era el minuto 22 y Kazajistán ni tan siquiera se aproximaba a la portería de Neuer.
Alemania tocaba y tocaba, y los kazajos esperaban en su propio campo. Durante la primera mitad no lanzaron a la meta germana y al inicio de la segunda parte apenas dos internadas de peligro. Fue un espejismo. Alemania siguió mimando la pelota, matando el partido con la posesión y con Özil y Khedira campando a sus anchas. Pero Kazajistán tiro de orgullo y se acercó a la meta germana. Konysbaev lo intentó desde fuera del área, pero su lanzamiento se estrelló violentamente en el larguero. Acto seguido, Schmidtgal tuvo un mano a mano ante Neuer, que el portero del Bayern despejó a córner. Ahí acabaron las ocasiones locales y Alemania se volvió a estirar. Fruto de una nueva acometida llegó el último tanto del partido, obra de Müller tras nueva asistencia del siempre inspirado Özil. Así terminó un choque que en cinco días tendrá su replica en Alemania. Ahí, los de Löw, con nada que aprieten un poco, pueden lograr un resultado histórico...
Kazajistán: Sidelnikov; Gurman, Logvinenko, Dmitrenko, Kirov; Baizhanov (Korobkin, 36’), Nurdauletov; Dzholchiev, Khayrullin (Konysbaev, 65’), Schmidtgal; y Ostapenko.
Alemania: Neuer; Lahm, Mertesacker, Howedes, Schmelzer; Khedira (Gundogan, 82’), Schweinsteiger; Müller (Schurrle, 82’), Özil, Draxler (Podolski, 19’); y Götze.
Goles: 0-1 (20’): Müller. 0-2 (22’): Götze. 0-3 (74’): Müller.
Árbitro: Anastasios Kakos, griego. Amonestó a Logvinenko, Korobkin, Dmitrenko y Schweinsteiger.
Una Alemania a medio gas logró la victoria en Kazajistán (0-3), que le sirve para seguir liderando en solitario el grupo C. Joaquim Löw se mostró preocupado antes del choque por el césped artificial y el sistema defensivo kazajo. Sin embargo, sus temores se disiparon en apenas dos minutos, los que pasaron desde el 0-1 al 0-2. Después todo fue coser y cantar y el seleccionador alemán lo aprovechó para hacer diferentes probaturas. Una de ellas, jugar sin nueve puro, con Götze haciendo esa función como ya hizo en un amistoso reciente frente a Francia. El experimento le salió bien y en ningún momento tuvo problemas para sacar el encuentro adelante.
Ya desde el inicio del choque, Alemania mostró su repertorio. Como ya ensañase durante la semana, la paciencia, el toque y la movilidad fueron sus principales armas. Como si de un ataque de balonmano se tratase, los germanos movieron el balón a su antojo, de una banda a otra, con constantes apoyos y toques cortos. Así llegaron las mejores ocasiones, con un gran Draxler durante el tiempo que estuvo en el campo. Porque el extremo del Schalke tuvo que ser sustituido por Podolski. La pelota no terminaba de entrar, hasta que en dos jugadas prácticamente seguidas, primero Müller tras lanzamiento de Schweinsteiger y jugada inicial de Özil, y después Götze, tras un rechace del portero, hicieron el 0-2. Era el minuto 22 y Kazajistán ni tan siquiera se aproximaba a la portería de Neuer.
Alemania tocaba y tocaba, y los kazajos esperaban en su propio campo. Durante la primera mitad no lanzaron a la meta germana y al inicio de la segunda parte apenas dos internadas de peligro. Fue un espejismo. Alemania siguió mimando la pelota, matando el partido con la posesión y con Özil y Khedira campando a sus anchas. Pero Kazajistán tiro de orgullo y se acercó a la meta germana. Konysbaev lo intentó desde fuera del área, pero su lanzamiento se estrelló violentamente en el larguero. Acto seguido, Schmidtgal tuvo un mano a mano ante Neuer, que el portero del Bayern despejó a córner. Ahí acabaron las ocasiones locales y Alemania se volvió a estirar. Fruto de una nueva acometida llegó el último tanto del partido, obra de Müller tras nueva asistencia del siempre inspirado Özil. Así terminó un choque que en cinco días tendrá su replica en Alemania. Ahí, los de Löw, con nada que aprieten un poco, pueden lograr un resultado histórico...
Kazajistán: Sidelnikov; Gurman, Logvinenko, Dmitrenko, Kirov; Baizhanov (Korobkin, 36’), Nurdauletov; Dzholchiev, Khayrullin (Konysbaev, 65’), Schmidtgal; y Ostapenko.
Alemania: Neuer; Lahm, Mertesacker, Howedes, Schmelzer; Khedira (Gundogan, 82’), Schweinsteiger; Müller (Schurrle, 82’), Özil, Draxler (Podolski, 19’); y Götze.
Goles: 0-1 (20’): Müller. 0-2 (22’): Götze. 0-3 (74’): Müller.
Árbitro: Anastasios Kakos, griego. Amonestó a Logvinenko, Korobkin, Dmitrenko y Schweinsteiger.