Los inspectores de la AIEA ven centrifugadoras de última generación
Viena, EP
Los inspectores de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) han podido ver un pequeño número de centrifugadoras de última generación en la planta de enriquecimiento de uranio de Natanz, según han informado este jueves fuentes diplomáticas.
El director de la Organización de la Energía Atómica de Irán, Fereydun Abbasi Davani, anunció ayer miércoles que su país ha empezado a instalar, desde finales de enero, nuevas centrifugadoras de última generación --del tipo IR2-m-- en la planta de Natanz, en la que se están llevando a cabo labores de enriquecimiento de uranio hasta un cinco por ciento.
Las citadas fuentes diplomáticas han indicado, bajo condición de anonimato, que las centrifugadoras estaban preparadas para su instalación en Natanz, uno de los centros atómicos que suelen visitar regularmente los inspectores de la AIEA en Irán.
La introducción de la nueva tecnología podría capacitar a Irán para enriquecer uranio a mayor velocidad e incrementar, por tanto, las posibilidades armamentísticos de su programa nuclear.
Irán ha insistido en todo momento en que sus labores de refinado de uranio tienen objetivos meramente energéticos, pero las grandes potencias han advertido de que si la República Islámica consigue enriquecer uranio hasta el 90 por ciento, daría los pasos necesarios para desarrollar armamento atómico.
Los inspectores de la Agencia Internacional de la Energía Atómica (AIEA) han podido ver un pequeño número de centrifugadoras de última generación en la planta de enriquecimiento de uranio de Natanz, según han informado este jueves fuentes diplomáticas.
El director de la Organización de la Energía Atómica de Irán, Fereydun Abbasi Davani, anunció ayer miércoles que su país ha empezado a instalar, desde finales de enero, nuevas centrifugadoras de última generación --del tipo IR2-m-- en la planta de Natanz, en la que se están llevando a cabo labores de enriquecimiento de uranio hasta un cinco por ciento.
Las citadas fuentes diplomáticas han indicado, bajo condición de anonimato, que las centrifugadoras estaban preparadas para su instalación en Natanz, uno de los centros atómicos que suelen visitar regularmente los inspectores de la AIEA en Irán.
La introducción de la nueva tecnología podría capacitar a Irán para enriquecer uranio a mayor velocidad e incrementar, por tanto, las posibilidades armamentísticos de su programa nuclear.
Irán ha insistido en todo momento en que sus labores de refinado de uranio tienen objetivos meramente energéticos, pero las grandes potencias han advertido de que si la República Islámica consigue enriquecer uranio hasta el 90 por ciento, daría los pasos necesarios para desarrollar armamento atómico.