Fernando Vargas denuncia que represión en Chaparina estaba planificada y no hubo ruptura de mando
La Paz, ANF
El presidente de la Subcentral del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS), Fernando Vargas, afirmó este viernes que en la violenta intervención policial en Chaparina, Beni, no hubo ruptura de mando, porque el material logístico, los buses en los que se trasladó a los indígenas y el avión de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB) fueron contratados previamente por autoridades de Gobierno que tuvo que erogar recursos económicos con los que no cuentan las fuerzas policiales.
El dirigente indígena dijo que en las próximas horas se reconducirá la querella criminal que se inició contra el Gobierno por la represión en Chaparina, en la que se pedirá la ampliación de las investigaciones para otras autoridades como el ex ministro Sacha Llorenti, por “existir una relación continua de todo el proceso de intervención a la octava marcha”, señaló.
“Ahí se hizo una operación de manera conjunta, que quiere decir que estaban también las Fuerzas Armadas en ese lugar", dijo el ex subcomandante General de la Policía, general Oscar Muñoz. Entonces cuando se rompe una cadena de mando no hay pues la parte logística totalmente definida, estaban todos los carros, las flotas, e, incluso se tenía todo contratado. Además el General Colodro señaló que en la inspección que tenía constante comunicación de parte de autoridades superiores”, manifestó Vargas a Unitel.
Vargas, argumentó que no puede haber ruptura de mando porque tanto en la Policía como el Ejército, nadie de los subalternos hace una acción sin que el superior lo sepa, por lo que reitera que todo el operativo fue planificado y ejecutado bajo la supervisión de una autoridad superior a los oficiales policiales.
El presidente de la Subcentral del Territorio Indígena y Parque Nacional Isiboro Sécure (TIPNIS), Fernando Vargas, afirmó este viernes que en la violenta intervención policial en Chaparina, Beni, no hubo ruptura de mando, porque el material logístico, los buses en los que se trasladó a los indígenas y el avión de la Fuerza Aérea Boliviana (FAB) fueron contratados previamente por autoridades de Gobierno que tuvo que erogar recursos económicos con los que no cuentan las fuerzas policiales.
El dirigente indígena dijo que en las próximas horas se reconducirá la querella criminal que se inició contra el Gobierno por la represión en Chaparina, en la que se pedirá la ampliación de las investigaciones para otras autoridades como el ex ministro Sacha Llorenti, por “existir una relación continua de todo el proceso de intervención a la octava marcha”, señaló.
“Ahí se hizo una operación de manera conjunta, que quiere decir que estaban también las Fuerzas Armadas en ese lugar", dijo el ex subcomandante General de la Policía, general Oscar Muñoz. Entonces cuando se rompe una cadena de mando no hay pues la parte logística totalmente definida, estaban todos los carros, las flotas, e, incluso se tenía todo contratado. Además el General Colodro señaló que en la inspección que tenía constante comunicación de parte de autoridades superiores”, manifestó Vargas a Unitel.
Vargas, argumentó que no puede haber ruptura de mando porque tanto en la Policía como el Ejército, nadie de los subalternos hace una acción sin que el superior lo sepa, por lo que reitera que todo el operativo fue planificado y ejecutado bajo la supervisión de una autoridad superior a los oficiales policiales.