Arsenal venció a Argentinos y se fue Schurrer
Argentinos Juniors chocó este viernes contra los postes y su propia impotencia y después Arsenal le dio los golpes de gracia al superarlo 2-1 valiéndose de dos réplicas rápidas y precisas.
En el Estadio Diego Armando Maradona y por la tercera fecha del Torneo Final, en los dos goles de Arsenal tuvo una decisiva participación el dinámico mediocampista colombiano Carlos Carbonero, en un caso por su asistencia y en el otro inclusive por la autoría.
A los 20 minutos del segundo tiempo, Carbonero envió un centro desde la derecha cruzado y descendente, pero falló el cálculo del arquero local Nereo Fernández y la pelota se transformó en un premio para Furch por haber estado en el lugar y en el momento adecuado para poner el 1-0.
Apenas cuatro minutos después, Carbonero, dueño de la franja derecha de mitad de cancha hacia adelante, levantó la cabeza y puso el balón matemáticamente con una caída libre junto al ángulo superior derecho de un Fernández que se limitó a observar cómo se consumaba el 2-0.
Argentinos descontó a cinco minutos del desenlace porque Marcos Figueroa desbordó por la izquierda y mandó el oportuno centro hacia atrás que esperó con oficio y eficacia Leandro Barrera para poner una pequeña cuota de esperanza.
El 1-2 parece marcó el cierre precipitado del ciclo de Gabriel Schurrer al frente del plantel de los Bichitos Colorados.
Desde el principio Argentinos insistió en procura del triunfo que tanto necesitaba, pero empataba sin goles, a pesar de los dos bombazos en los palos que hizo estrellar Leonel Núñez.
El recurso que por entonces aproximó a los anfitriones a la victoria fue el de los remates desde fuera del área y dos de ellos, ambos lanzados por el cañonero Núñez, dieron en los parantes de la portería de Cristian Campestrini, más precisamente en el poste derecho y en el travesaño, uno en cada capítulo.
Pero mientras el conjunto de Schurrer buscaba perforar el arco de los de Sarandí, a partir del gol de Furch se agravó la situación para los Bichitos Colorados.
Cuando aumentó Carbonero, con su acierto exquisito en la red, la dificultad para Argentinos se tornó irremediable.
El descuento de Barrera se pareció a un manotazo de ahogado para un Argentinos Juniors que sigue sin levantar ni encontrarle salida a su crisis futbolística.
En cambio, en la noche porteña, a Arsenal le salió todo bien, si hasta lo ayudaron los palos.