Oposición siria no logra formar Gobierno de transición
Los líderes de la oposición siria dijeron el lunes que no habían logrado formar un Gobierno de transición para que administre las áreas en manos de los rebeldes, un nuevo revés para sus esfuerzos de presentar una alternativa creíble al mandato del presidente Bashar al-Assad.
Los esfuerzos políticos por resolver el conflicto han fracasado ante la incapacidad de los rebeldes de formar un frente unido y porque las potencias mundiales apoyan a diferentes bandos en el conflicto.
Las negociaciones mantenidas por representantes de la opositora Coalición Nacional Siria (SNC, por su sigla en inglés), un grupo de 70 miembros dominado por islamistas y sus aliados, en Estambul el fin de semana sólo subrayaron las divisiones en la organización.
"Este es un gran golpe para la revolución contra Bashar al-Assad", dijo uno de los líderes de la oposición que asistió al encuentro pero que no quiso ser nombrado porque opera oculto en Siria.
Fuentes cercanas a las negociaciones dijeron el domingo que el presidente de la SNC, Moaz Alkhatib, había viajado a Qatar para pedir ayuda financiera para un Gobierno de transición.
La SNC dijo en un comunicado que un comité de cinco miembros presentaría propuestas para formar un Gobierno de transición en el plazo de 10 días.
Sin embargo, el único nombre propuesto en la reunión como posible primer ministro de transición fue el de Riad Hijab, un ex premier sirio y funcionario de mayor rango que ha desertado de las líneas de Assad desde que surgió la revuelta en Siria en marzo del 2011.
Más de 60.000 personas han muerto en la sangrienta guerra civil que empezó 22 meses atrás, al menos 60.000 se convirtieron en refugiados y 2,5 millones sufren de hambre.
Ningún bando en el conflicto ha podido imponerse militarmente. Los rebeldes han tomado partes del territorio pero permanecen en desventaja ante el poder militar aéreo y la organización de las fuerzas del Gobierno.
El lunes, la primera de seis baterías de misiles Patriot de la OTAN para proteger a Turquía de un potencial ataque sirio llegó desde Alemania luego de que Ankara pidiera ayuda a la alianza para reforzar la seguridad en su frontera de 900 kilómetros.
Damasco calificó como "provocativa" esa acción, en parte debido a que la solicitud de misiles de Turquía podría ser vista como el primer paso hacia la implementación de una zona de exclusión aérea sobre Siria.
Irán y Rusia, que han apoyado a Assad, criticaron la decisión de la OTAN, diciendo que el envío de misiles intensificará un conflicto en el que la mayoría de los Gobiernos extranjeros no ha querido involucrarse.
Las potencias mundiales se han vuelto más cautelosas de apoyar a los insurgentes, especialmente porque combatientes islamistas, entre ellos algunos vinculados a Al Qaeda, han tomado la iniciativa en muchas área en la batalla contra las fuerzas de Assad.
El lunes, la agencia de noticias Interfax dijo que el ministerio de Emergencias enviará dos aviones a Beirut, en el Líbano, para ayudar a ciudadanos rusos a abandonar Siria.
"Por órdenes del Gobierno de la Federación Rusa, el Ministerio de Emergencias enviará dos aviones a Beirut para que todos los rusos que quieran puedan partir de Siria", dijo la portavoz del ministerio, Irina Rossius, citada por la agencia.
"Está previsto que más de 100 rusos abandonen Siria (en estos aviones)", agregó.
ENFRENTAMIENTOS EN DAMASCO
Un ataque aéreo en la zona de Harran al-Awamid, al este de Damasco, causó la muerte de al menos nueve personas el domingo, dijo el Observatorio Sirio para los Derechos Humanos.
Los crecientes precios de los alimentos básicos y la escasez de combustible han dificultado la vida para los residentes de la capital y algunos dijeron que pasaron la noche del domingo sin energía mientras los enfrentamientos se acercaban al centro de la ciudad.
Los insurgentes controlan varios suburbios al este y al sur de la ciudad y avanzan lentamente hacia el centro de la capital. Residentes dijeron que el domingo estallaron enfrentamientos a menos de un kilómetro de la Ciudad Antigua de Damasco.
No estaba clara la causa del apagón del domingo, aunque la agencia estatal de noticias SANA citó al ministro de Electricidad diciendo que "terroristas", un término que Damasco usa para referirse a los rebeldes, habían atacado una línea principal de energía.
El fracaso de los rebeldes para brindar servicios básicos, los crecientes reportes de indisciplina y saqueos por parte de los combatientes han minado el respaldo público a su causa.
