El gran sudoku de Mourinho todavía deja abierta la polémica
Dos días más de incertidumbre, de inestabilidad en el ambiente y de inseguridad en los porteros. Hasta las 21:30 horas de mañana (Real Madrid-Celta) Mourinho no rellenará otro espacio en el particular sudoku que maneja estos días. "El que juegue mañana no lo hará el miércoles en Copa, y el que juegue el miércoles no lo hará mañana", dijo en la previa ante la Real, sin haber dado una pista ni a los propios interesados en las sesiones previas al partido. Y como las carga el diablo, el inicio del encuentro ante la Real, con Adán en la puerta contra todo pronóstico, rompió en esperpento. Fallo y expulsión a los seis minutos.
Falta saber ahora, según el código indescifrable de Mou con este asunto, a quién le corresponde el puesto ante el Celta. Si a Casillas, que fue suplente y jugó 84 minutos, o a Adán, que siendo titular jugó sólo seis. Porque fue Casillas, realmente, el que jugó.
Para las dos opciones (Casillas o Adán) hay argumentos. Y no tienen que ver con que Iker haya levantado dos Eurocopas, un Mundial, dos Champions... Que sea el mejor portero del mundo cinco años consecutivos para la IFFHS y que esté en el once ideal de la FIFA (votado por los propios jugadores) también cinco años seguidos (el último, oficializado ayer). Tampoco que Adán (16 años en La Fábrica) no tenga minutos en las últimas tres temporadas (en las que fue suplente de Casillas). Sólo cinco partidos en la 2010-11 (397 minutos), cinco en la 2011-12 (442) y seis en esta (456). Esos argumentos no parecen contar para Mourinho.
Intentamos buscar otros, como que Adán no podrá jugar ante Osasuna por sanción en Liga y sí podrá hacerlo en Copa. En 2011 hubo un cambio de normativa. Las sanciones leves (hasta tres partidos) se cumplen en la misma competición. Las graves (cuatro o más) se cumplen por orden cronológico. Marcelo, Villa y Özil, expulsados con roja directa en la Supercopa de 2011, cumplieron el partido de sanción en la siguiente Supercopa.
Mou podría estar tentado de volver a poner a Adán ("Se le ha faltado al respeto. ¿Por qué no tiene derecho a jugar y ser feliz?"). Puede, incluso, que pese en su conciencia haber marcado a un jugador al que dio la portería en el peor contexto (en Málaga, con el cuarto clasificado, y ante la Real, en medio de un cisco y el runrún del Bernabéu). Razones por las que podría darle otra oportunidad mañana (ya que está sancionado para Pamplona). Una especie de desagravio. Y el argumento a favor de Casillas (además de todos los objetivos) que con el Barça a 16 puntos en Liga y la Champions en el aire, la Copa es una opción de salvar la temporada. Partido importante, portero titular. Pero para resolver el enigma, aún faltan dos días más de turbulencias.
