Condenado a 20 años un ex policía serbio por crímenes contra la Humanidad
Sarajevo, EP
El ex policía serbio Bozidar Kuvelja ha sido condenado este viernes a 20 años de prisión por su papel en la matanza de musulmanes en la ciudad de Srebenica durante la guerra de Bosnia en 1995, según ha dictaminado la Sala de Primera Instancia del Tribunal de Bosnia para Crímenes de Guerra.
El ex agente, de 41 años de edad, fue hallado culpable de crímenes contra la Humanidad al participar en la persecución y eliminación de varias decenas de bosniacos (bosnios musulmanes) en la población de Kravica entre el 11 y el 14 de julio de 1995, según la sentencia leída por la magistrada Jasmina Kosovic.
Kuvelka fue hallado culpable del delito de crímenes contra la Humanidad, pero fue absuelto de genocidio al no demostrar el tribunal más allá de la duda razonable la intención genocida de los responsables de la masacre cometida en Kravica.
Kuvelja, en ese momento oficial de la Brigada Especial de la Policía del Ministerio del Interior serbiobosnio, se encargó de organizar el procedimiento para la ejecución de decenas de bosniacos. Primero dividía a los civiles en hombres y mujeres, y después gestionaba su traslado a un almacén de Kravica, donde eran ejecutados por miembros de su unidad con armas automáticas y granadas de mano que empleaban en las instalaciones abarrotadas.
Los supervivientes de los asaltos eran rematados posteriormente por la brigada de Kuvelja tras instarles a salir de entre los cadáveres bajo la promesa de tratamiento médico y obligarles a cantar himnos nacionalistas serbios antes de volver a abrir fuego contra ellos, según la jueza.
El ex policía serbio Bozidar Kuvelja ha sido condenado este viernes a 20 años de prisión por su papel en la matanza de musulmanes en la ciudad de Srebenica durante la guerra de Bosnia en 1995, según ha dictaminado la Sala de Primera Instancia del Tribunal de Bosnia para Crímenes de Guerra.
El ex agente, de 41 años de edad, fue hallado culpable de crímenes contra la Humanidad al participar en la persecución y eliminación de varias decenas de bosniacos (bosnios musulmanes) en la población de Kravica entre el 11 y el 14 de julio de 1995, según la sentencia leída por la magistrada Jasmina Kosovic.
Kuvelka fue hallado culpable del delito de crímenes contra la Humanidad, pero fue absuelto de genocidio al no demostrar el tribunal más allá de la duda razonable la intención genocida de los responsables de la masacre cometida en Kravica.
Kuvelja, en ese momento oficial de la Brigada Especial de la Policía del Ministerio del Interior serbiobosnio, se encargó de organizar el procedimiento para la ejecución de decenas de bosniacos. Primero dividía a los civiles en hombres y mujeres, y después gestionaba su traslado a un almacén de Kravica, donde eran ejecutados por miembros de su unidad con armas automáticas y granadas de mano que empleaban en las instalaciones abarrotadas.
Los supervivientes de los asaltos eran rematados posteriormente por la brigada de Kuvelja tras instarles a salir de entre los cadáveres bajo la promesa de tratamiento médico y obligarles a cantar himnos nacionalistas serbios antes de volver a abrir fuego contra ellos, según la jueza.