Vélez se consagró campeón del Torneo Inicial



Buenos Aires, EFE
Costó pero al fin hubo fiesta el domingo a la tarde en Liniers, y encima anticipada, por el 9º título de Vélez Sarsfield en el fútbol argentino, al consagrarse campeón del Torneo Inicial, tras vencer 2-0 a Unión.


La victoria construida con dos goles de Facundo Ferreyra, el joven que descendió con Banfield hace seis meses y hoy es el goleador del campeón, le dio enjundia para salir a festejar y dar la vuelta olímpica casi cinco minutos antes de que se cierre el triunfo de River sobre Lanús, el único que podía extenderle la ansiedad una semana más.

Con la moderación que siempre lo caracterizo, el técnico Ricardo Gareca escuchó el final del partido del Monumental junto a los periodistas dentro del campo y fue cortés al responder preguntas sobre su continuidad pese a que aún mantuvo el enigma. Luego del pitazo, levantó los brazos y fue a buscar uno a uno a sus dirigidos para darles un casi paternal abrazo.

Había pasado un primer tiempo incómodo sin desplegar las razones futbolísticas por las que llegó a la penúltima fecha como amplias chances de título.

Sólo algunos intentos aislados en los primeros minutos lograron inquietar a Perafán, arquero de Unión, con un desborde de Bella que conectó Ferreyra y luego cuando Tobio y el Chucky se lo perdieron en una jugada confusa.

Tan a contramano venía el partido para Vélez que a los 32 Tobio intentó despejar dentro del área, la pelota rebotó en Montero y le quedó a Alejandro Pérez, quien remató cruzado y la pelota se fue acariciando el palo derecho de Sosa.

Vélez cambió en el segundo y se reencontró con sus mejores atributos. A los 2 minutos avisó Bella con un remate que dio en el travesaño y uno después Vélez soltó el primer grito cuando Papa habilitó por izquierda a Cabral, centro y cabezazo de Ferreyra para el 1-0.

Vélez ya empezó a mostrarse como campeón y así y todo sufrió sofocones, cuando el ingresado recién ingresado Emanuel Moreno sacó un disparo que el arquero Sebastián Sosa tapó poniendo cuerpo y alma en la más difícil que tuvo.

Luego fue el turno de Andrés Franzoia cuando tuvo el empate a merced pero casi dentro del área chica disparó a las nubes.

Faltaban once minutos en Liniers para el final de ese partido cuando explotó el Amalfitani con el gol del uruguayo Mora en el Monumental y ahí se largó la fiesta.

Encima, rápido Ferreyra definió a la derecha de Perafán para el segundo tras la habilitación de Lucas Pratto, como sellando ambos la sociedad joven que sin antecedentes en el club de repente se convirtió en la delantera campeona.

Entradas populares