La Navidad, el mejor escaparate
La 'Premier' y la NBA utilizan las vacaciones para vender su producto a audiencias globales
J. J. M.
Madrid, El País
Era miércoles, pero más de 75.500 personas vieron en directo y desde las 16.00 cómo el Manchester United remontaba en el último minuto al Newcastle (4-3) —con gol de Chicharito— para aumentar su ventaja al frente de la Premier League hasta los siete puntos que ahora le saca al City (derrota por 1-0 frente al Sunderland).
Ocurrió el 26 de diciembre. En plenas Navidades. Como culminación del tradicional Boxing Day inglés. Mientras otros deportistas descansan, los futbolistas de la Premier League inglesa y escocesa, y los baloncestistas de la NBA, estos convocados en horarios de máxima audiencia el mismo día 25, aprovechan para vender su producto: los organizadores de ambas competiciones entienden que las fiestas navideñas son el mejor escaparate para llegar a una audiencia global, además de una oportunidad única para llenar sus estadios con familias al completo.
Así, la Premier League inglesa ha programado tres jornadas del campeonato en apenas ocho días, para un total de 30 partidos, 62 si se les unen los correspondientes a la tercera ronda de la FA Cup. En la NBA, los organizadores programaron en pleno día de Navidad los mejores partidos posibles: entre otros, los Knicks de Melo Anthony —el icono del gran mercado del Este—, perdieron ante los Lakers de Kobe Bryan —la estrella de uno de los grandes mercados del Oeste—; y los Miami de LeBron James se cruzaron con los Oklahoma de Kevin Durant, reeditando de la final de 2012... todo emitido por la televisión a escala nacional y en horarios que permitieron que los encuentros se retransmitieran en Europa en franjas para todos los públicos, y no solo para noctámbulos.
Las ligas de fútbol española, alemana e italiana paran por las fiestas. También la francesa, donde sin embargo se juega la Copa el 5 de enero, víspera del día de Reyes.
En el caso español, el parón es fruto de las reivindicaciones laborales de los futbolistas: la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), sindicato entonces encabezadO por Quino, que fue delantero de Betis, Valencia y Cádiz, ya convocó huelgas en 1979 y 1980 para que se reconociera a los jugadores el derecho a descansar durante las Navidades como cualquier otro trabajador. Con ese ejemplo, son tradicionales las quejas de los futbolistas extranjeros que militan en la Premier League, que reclaman un descanso como el que tendrá obligatoriamente Wayne Rooney, la estrella del United, baja “dos o tres semanas” por una lesión en el ligamento de la rodilla derecha que no debería impedirle llegar a tiempo de jugar los octavos de la Champions con el Madrid.
Juan Mata, sin embargo, no necesita días de asueto: el internacional español marcó su séptimo tanto de la temporada, decimotercero desde que el curso pasado llegó al campeonato inglés, y le dio la victoria al Chelsea frente al Norwich. “Están demostrando carácter”, dijo Rafael Benítez de los suyos, ganadores en plenas Navidades.
J. J. M.
Madrid, El País
Era miércoles, pero más de 75.500 personas vieron en directo y desde las 16.00 cómo el Manchester United remontaba en el último minuto al Newcastle (4-3) —con gol de Chicharito— para aumentar su ventaja al frente de la Premier League hasta los siete puntos que ahora le saca al City (derrota por 1-0 frente al Sunderland).
Ocurrió el 26 de diciembre. En plenas Navidades. Como culminación del tradicional Boxing Day inglés. Mientras otros deportistas descansan, los futbolistas de la Premier League inglesa y escocesa, y los baloncestistas de la NBA, estos convocados en horarios de máxima audiencia el mismo día 25, aprovechan para vender su producto: los organizadores de ambas competiciones entienden que las fiestas navideñas son el mejor escaparate para llegar a una audiencia global, además de una oportunidad única para llenar sus estadios con familias al completo.
Así, la Premier League inglesa ha programado tres jornadas del campeonato en apenas ocho días, para un total de 30 partidos, 62 si se les unen los correspondientes a la tercera ronda de la FA Cup. En la NBA, los organizadores programaron en pleno día de Navidad los mejores partidos posibles: entre otros, los Knicks de Melo Anthony —el icono del gran mercado del Este—, perdieron ante los Lakers de Kobe Bryan —la estrella de uno de los grandes mercados del Oeste—; y los Miami de LeBron James se cruzaron con los Oklahoma de Kevin Durant, reeditando de la final de 2012... todo emitido por la televisión a escala nacional y en horarios que permitieron que los encuentros se retransmitieran en Europa en franjas para todos los públicos, y no solo para noctámbulos.
Las ligas de fútbol española, alemana e italiana paran por las fiestas. También la francesa, donde sin embargo se juega la Copa el 5 de enero, víspera del día de Reyes.
En el caso español, el parón es fruto de las reivindicaciones laborales de los futbolistas: la Asociación de Futbolistas Españoles (AFE), sindicato entonces encabezadO por Quino, que fue delantero de Betis, Valencia y Cádiz, ya convocó huelgas en 1979 y 1980 para que se reconociera a los jugadores el derecho a descansar durante las Navidades como cualquier otro trabajador. Con ese ejemplo, son tradicionales las quejas de los futbolistas extranjeros que militan en la Premier League, que reclaman un descanso como el que tendrá obligatoriamente Wayne Rooney, la estrella del United, baja “dos o tres semanas” por una lesión en el ligamento de la rodilla derecha que no debería impedirle llegar a tiempo de jugar los octavos de la Champions con el Madrid.
Juan Mata, sin embargo, no necesita días de asueto: el internacional español marcó su séptimo tanto de la temporada, decimotercero desde que el curso pasado llegó al campeonato inglés, y le dio la victoria al Chelsea frente al Norwich. “Están demostrando carácter”, dijo Rafael Benítez de los suyos, ganadores en plenas Navidades.