Flacioni no seguirá como técnico de Boca según el diario Olé
Pasaron cinco días entre reunión y reunión, y el mundo cambió. No se terminó, como predicen los mayas; pero tuvo un evento que modificó todo. El miércoles pasado (5/11), Falcioni y Angelici se juntaron a cenar y, sonrientes, posaron para la cámara. Parecía que la continuidad estaba sellada. Sin embargo, Riquelme habló, movió las aguas y la Bombonera dio el veredicto final, insultando al entrenador y dejando en claro la postura del hincha. Olé avisó que el ciclo de Julio César ya estaba terminado. Y, luego de otro careo entre las partes, se confirmó el final de la novela. Chau, felicidades.
Aquella reunión había dejado todo listo, sólo faltaba la firma, el gancho por seis meses más. Ese era el deseo de los dirigentes, a la espera de que Guillermo termine su contrato en Lanús. Ojo, también fue el detonante para que otro pesado salga a declara. Riquelme se sintió tocado y largó palabras picantes, sobre todo contra el presiente. Hasta Grecco, representante de Falcioni, dijo que “fue un error político haberse reunido antes del partido con Godoy Cruz”. Pasaron las horas, la gente mostró desencantos en Twitter, nació la interna con las redes oficiales del club y, el sábado, la Bombonera dio su veredicto. "Falcioni, hijo de puta...", cantaron, y la siguieron con Angelici.
