El Partido de Mursi ofrece a fuerzas opositoras un diálogo incondicional

Madrid, EP
El Partido Libertad y Justicia (PLJ), vinculado a Hermanos Musulmanes, grupo islámico al que pertenece el presidente egipcio, Mohamed Mursi, ha ofrecido a las fuerzas opositoras un diálogo incondicional sobre los problemas del país árabe.


"Ahora que las razones que han llevado a la oposición a rechazar el borrador constitucional han desaparecido, podemos empezar a hablar", ha dicho Ibrahim Abu Ouf, miembro del PLJ, a la agencia de noticias Anadolu.

En este sentido, ha recordado que, tras la aprobación en referéndum del borrador constitucional, todavía es necesario llegar a acuerdos para elaborar las normas jurídicas más importantes del país, como la Ley Electoral, la Ley del Consejo de la Shura, la Ley del Poder Judicial y la Ley de Manifestaciones.

En la misma línea, Gamal Heshmat, otro miembro del PLJ, ha explicado que el diálogo entre las fuerzas gubernamentales y opositoras podría servir para diseñar la 'hoja de ruta' de la próxima fase de la transición política.

Por su parte, Mohamed al Beltagy, también del PLJ, ha confiado en que Hermanos Musulmanes y el Frente de Liberación Nacional (FLN) --coalición opositora-- consigan llegar a un acuerdo sobre las enmiendas constitucionales.

"Permitid que este viernes sea un día de reconciliación nacional, dejad que nos demos flores los unos a los otros", ha dicho Al Beltagy, en contraposición a las ya tradicionales manifestaciones de los viernes contra el Gobierno, según el diario 'Al Masry al Youm'.

Ayer, los principales partidos políticos egipcios --tanto oficialistas como opositores-- dieron por segura la victoria del 'sí' en el referéndum sobre el borrador constitucional que se celebró el 16 y el 23 de diciembre.

Hermanos Musulmanes había abogado por el 'sí' al considerar que es "una oportunidad histórica para unir a todos los poderes nacionales sobre la base del respeto mutuo y el diálogo sincero por la estabilidad del país".

En cambio, la oposición había llamado a votar por el 'no' al considerar que el texto sometido a consulta popular posee un sesgo islamista que atenta contra el principio de igualdad entre los egipcios, vulnerando especialmente los derechos de las minorías religiosas y de las mujeres.

Desde que la Asamblea Constituyente --de marcado carácter islamista-- entregó a Mursi el borrador de la Carta Magna, a principios del mes de diciembre, se han sucedido los enfrentamientos entre simpatizantes y detractores del Gobierno.

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