El Gobierno de la República Democrática del Congo recupera el control de la ciudad de Goma
Goma, EP
El Gobierno de la República Democrática del Congo ha retomado el control este lunes de la ciudad de Goma, la capital de la provincia Kivu Norte, en el este del país, tras la retirada del grupo rebelde Movimiento 23 de Marzo (M23), aunque el Ejecutivo ha precisado que los milicianos se encuentran a solo unos kilómetros de la ciudad y siguen suponiendo una amenaza.
La Misión de Naciones Unidas en la República Democrática del Congo (MONUSCO) ha confirmado este lunes el repliegue de los rebeldes. Las tropas de la ONU, que ascienden a 6.700 en la provincia de Kivu Norte y a 1.500 en su capital, se han apostado en las sedes del Banco Central congoleño, el Ayuntamiento y en las principales infraestructuras de comunicación de Goma.
Este repliegue obedece a la firma de un acuerdo mediante el cual se establece una zona neutral para poner fin a los enfrentamientos entre los milicianos y los soldados congoleños, bajo la mediación de Uganda. Los rebeldes deben estar a 20 kilómetros al norte de Goma.
El gobernador de Kivu Norte, Julien Paluku, que abandonó Goma con la entrada del M23 el pasado 20 de noviembre, se ha reunido con el ministro del Interior congoleño, Richard Muyej, en un hotel de la ciudad. "He venido aquí para trabajar como antes", ha precisado el dirigente local.
Paluku ha criticado que algunas unidades del M23 se encuentran en posiciones que violan el acuerdo firmado la semana pasada. "Están en Monigi. Están a sólo a tres ó cinco kilómetros. Eso no es bueno", ha indicado.
El portavoz del M23, Amani Kabasha, ha señalado que algunos rebeldes se encuentran en Monigi porque forman parte de un destacamento del grupo que se reunirá con soldados del Ejército nacional y de las tropas de la ONU en el aeropuerto de Goma, donde se decidirá la línea que separará a los militares de los insurgentes.
Las calles de Goma se han vuelto a llenar de transeúntes tras semanas de patrullas de insurgentes, mezclados con soldados del Ejército. Sin embargo, varios residentes se han quejado de que los bancos no han abierto y que la falta de dinero les ha impedido comprar.
Por su parte, la Oficina de la ONU para Asuntos Humanitarios (UNOCHA) ha indicado que al menos 130.000 personas huyeron de Goma tras la entrada del M23 y que, actualmente, se encuentran desplazados alrededor de la ciudad en campamentos.
El Gobierno de la República Democrática del Congo ha retomado el control este lunes de la ciudad de Goma, la capital de la provincia Kivu Norte, en el este del país, tras la retirada del grupo rebelde Movimiento 23 de Marzo (M23), aunque el Ejecutivo ha precisado que los milicianos se encuentran a solo unos kilómetros de la ciudad y siguen suponiendo una amenaza.
La Misión de Naciones Unidas en la República Democrática del Congo (MONUSCO) ha confirmado este lunes el repliegue de los rebeldes. Las tropas de la ONU, que ascienden a 6.700 en la provincia de Kivu Norte y a 1.500 en su capital, se han apostado en las sedes del Banco Central congoleño, el Ayuntamiento y en las principales infraestructuras de comunicación de Goma.
Este repliegue obedece a la firma de un acuerdo mediante el cual se establece una zona neutral para poner fin a los enfrentamientos entre los milicianos y los soldados congoleños, bajo la mediación de Uganda. Los rebeldes deben estar a 20 kilómetros al norte de Goma.
El gobernador de Kivu Norte, Julien Paluku, que abandonó Goma con la entrada del M23 el pasado 20 de noviembre, se ha reunido con el ministro del Interior congoleño, Richard Muyej, en un hotel de la ciudad. "He venido aquí para trabajar como antes", ha precisado el dirigente local.
Paluku ha criticado que algunas unidades del M23 se encuentran en posiciones que violan el acuerdo firmado la semana pasada. "Están en Monigi. Están a sólo a tres ó cinco kilómetros. Eso no es bueno", ha indicado.
El portavoz del M23, Amani Kabasha, ha señalado que algunos rebeldes se encuentran en Monigi porque forman parte de un destacamento del grupo que se reunirá con soldados del Ejército nacional y de las tropas de la ONU en el aeropuerto de Goma, donde se decidirá la línea que separará a los militares de los insurgentes.
Las calles de Goma se han vuelto a llenar de transeúntes tras semanas de patrullas de insurgentes, mezclados con soldados del Ejército. Sin embargo, varios residentes se han quejado de que los bancos no han abierto y que la falta de dinero les ha impedido comprar.
Por su parte, la Oficina de la ONU para Asuntos Humanitarios (UNOCHA) ha indicado que al menos 130.000 personas huyeron de Goma tras la entrada del M23 y que, actualmente, se encuentran desplazados alrededor de la ciudad en campamentos.