U. Católica venció a Independiente y pasó a las semifinales
Santiago de Chile, EFE
Dos goles de penal de Michel Ríos pusieron a la Universidad Católica en las semifinales de la Copa Sudamericana con una victoria por 2-1 sobre Independiente, de Argentina.
En un partido de muchas emociones en ambos arcos el equipo chileno que dirige el uruguayo Martín Lasarte consolidó una ventaja que comenzó a tomar forma en el partido de ida de cuartos de final que terminó con empate 2-2 en Avellaneda.
Ríos convirtió el primer penal a los 17 minutos pero Jonathan Santana empató a los 36. La alegría duró poco para el equipo argentino porque el mismo Ríos puso el gol con otro penal tres minutos después.
El centrocampista completó cinco goles en su campaña y alcanzó en la cima al uruguayo Carlos Núñez del Liverpool, y al brasileño Fábio Renato, de Liga de Loja. Ambos jugadores quedaron fuera de acción por la eliminación de sus equipos.
En cinco participaciones en la Copa Sudamericana la UC alcanzó por segunda vez la instancia semifinal. La primera fue en la edición de 2005.
Tras el primer gol de la Católica, el Independiente cambió su esquema defensivo y buscó presionar por las bandas.
Lucas Villafáñez dio el primer aviso del equipo visitante y permitió el lucimiento del guardameta Cristopher Toselli, que nada pudo hacer a los 36 minutos para evitar el gol de Santana.
Pero poco duró la alegría los jugadores de Américo Gallego ya que una falta de Cristián Tula en el área chica sobre Francisco Pizarro fue castigada con un nuevo lanzamiento de Michael Ríos.
En el segundo tiempo, el encuentro fue más parejo, con un Independiente más incisivo, con mucho juego por las bandas, pero con los universitarios encima de cada rival, lo que desató una serie de fricciones.
Católica pagó caro la expulsión de Fernando Cordero a los 62 minutos, porque solo la fortuna y el buen desempeño del meta Toselli evitaron la igualdad por parte de Independiente.
Por momentos el desconcierto en los jugadores de Lasarte fue total y los desaciertos en la defensa hicieron sufrir a una hinchada que solo pudo festejar al término de un sufrido partido.
De hecho en menos de un minuto, primero se lo perdió Tula y después lo desperdició Farías que no pudo encajar una palomita.
Este partido de vuelta de los cuartos de final de la Copa Sudamericana se disputó ante 10.000 espectadores, en el estadio San Carlos de Apoquindo, de Santiago de Chile.
