Sarkozy no recibió ni "un céntimo" de Bettencourt en campaña electoral de 2007
París, EP
El expresidente francés Nicolás Sarkozy ha negado haber recibido "un céntimo" en donaciones para la campaña electoral de la Unión por un Movimiento Popular (UMP) de 2007 de la mujer más rica de Francia y heredera de L'Oreal, Liliane Bettencourt.
De acuerdo con los extractos publicados este sábado por el diario galo 'Sud-Ouest' de su testimonio al tribunal, Sarkozy refuta las acusaciones de mala praxis y financiamiento ilegal de la UMP.
Sarkozy declaró durante más de doce horas el pasado jueves ante el tribunal, que investiga las donaciones realizadas por Bettencourt que recibió en 2007 en su campaña para la reelección.
"Conozco a los Bettencourt desde que tenía 28 años. Ahora tengo 57", adujo Sarkozy. "Nunca me han dado ni un céntimo, nunca les he dado ni uno y nunca les he pedido nada", argumentó.
Este proceso comenzó hace tres años cuando una mujer que trabajaba con contable para Bettencourt, en estado de demencia desde 2006, denunció que una gran cantidad de dinero fueron a parar a sufragar la campaña presidencial de Sarkozy en las elecciones que resultó reelegido.
Sobre la salud de la heredera de L'Oreal, Sarkozy respondió que no ve en su estado ningún atisbo de vulnerabilidad. "Ella está bien vestida, no tartamudea, no dice cosas inverosímiles", alega. La familia Bettencourt, que conserva un 30 por ciento de las acciones de L'Oreal, tiene estrechos lazos con la UMP.
El expresidente francés Nicolás Sarkozy ha negado haber recibido "un céntimo" en donaciones para la campaña electoral de la Unión por un Movimiento Popular (UMP) de 2007 de la mujer más rica de Francia y heredera de L'Oreal, Liliane Bettencourt.
De acuerdo con los extractos publicados este sábado por el diario galo 'Sud-Ouest' de su testimonio al tribunal, Sarkozy refuta las acusaciones de mala praxis y financiamiento ilegal de la UMP.
Sarkozy declaró durante más de doce horas el pasado jueves ante el tribunal, que investiga las donaciones realizadas por Bettencourt que recibió en 2007 en su campaña para la reelección.
"Conozco a los Bettencourt desde que tenía 28 años. Ahora tengo 57", adujo Sarkozy. "Nunca me han dado ni un céntimo, nunca les he dado ni uno y nunca les he pedido nada", argumentó.
Este proceso comenzó hace tres años cuando una mujer que trabajaba con contable para Bettencourt, en estado de demencia desde 2006, denunció que una gran cantidad de dinero fueron a parar a sufragar la campaña presidencial de Sarkozy en las elecciones que resultó reelegido.
Sobre la salud de la heredera de L'Oreal, Sarkozy respondió que no ve en su estado ningún atisbo de vulnerabilidad. "Ella está bien vestida, no tartamudea, no dice cosas inverosímiles", alega. La familia Bettencourt, que conserva un 30 por ciento de las acciones de L'Oreal, tiene estrechos lazos con la UMP.