Flotas analizan subir pasajes en 30% por rebaja de crédito fiscal
La Paz, Fides
Un bus se aprovisiona de diésel en una estación de servicio.
Las empresas de transporte interdepartamental de pasajeros evalúan un posible incremento de al menos 30% en el precio de los pasajes debido a que sus ingresos se verán afectados por la reducción de crédito fiscal por las compras de gasolina. El Gobierno acusa a los transportistas de no querer pagar impuestos.
El gerente de Trans Copacabana MEM, Marcos Lanza, informó a Página Siete que “vamos a tener que incrementar los pasajes para recuperar todo eso, los pasajes tendrían que subir en un 30%, si van a bajar un 30% (al crédito fiscal de la compra de carburantes), entonces vamos a tener que subir en un 30%”.
El ejecutivo añadió que el Sindicato de Transporte Interdepartamental e Internacional de Buses de la ciudad de La Paz evalúa la posibilidad de incrementar el precio de los pasajes.
Entretanto, otros sectores como el transporte pesado y los agricultores evalúan el impacto que puede tener en sus ingresos que las facturas por compra de combustibles sean válidas para un menor descargo impositivo.
La disposición transitoria tercera del proyecto de Ley de Presupuesto General del Estado de 2013 establece que “en la compra de gasolina especial, gasolina premium o diésel oil, las personas naturales o jurídicas computarán como crédito fiscal para la liquidación del Impuesto al Valor Agregado (IVA) sólo el 70% sobre el crédito fiscal del valor de la compra”.
El lunes, el presidente de la Confederación Nacional de Choferes de Bolivia, Franklin Durán, aseveró que “lamentablemente, en el transporte pesado y de pasajeros no tiene la posibilidad descargar (nuestros impuestos) con otras facturas. Si nos van a restringir esto es mejor que nos digan que ya no vale nada”.
Ayer, el ministro de Economía, Luis Arce, señaló que los combustibles no subieron de precio, por lo tanto los pasajes no deben elevarse. Afirmó que los choferes “son los más beneficiados con la subvención al diésel y a la gasolina, y son siempre los que no quieren pagar impuestos” .
El presidente de la Cámara de Transporte Pesado de El Alto, Gustavo Rivadeneira, afirmó que “de acuerdo a la Ley 843, sólo tenemos para nuestro descargo (de impuestos) la compra de repuestos, combustible y otros, pero ni siquiera eso alcanza para cubrir nuestros gastos y nos afecta la informalidad; por ejemplo, los talleres no nos dan facturas”.
La Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) -según su gerente, Rolando Zabala- analiza cuál será el impacto que tendrá esta medida en su sector, uno de los principales consumidores de diésel.
Un bus se aprovisiona de diésel en una estación de servicio.
Las empresas de transporte interdepartamental de pasajeros evalúan un posible incremento de al menos 30% en el precio de los pasajes debido a que sus ingresos se verán afectados por la reducción de crédito fiscal por las compras de gasolina. El Gobierno acusa a los transportistas de no querer pagar impuestos.
El gerente de Trans Copacabana MEM, Marcos Lanza, informó a Página Siete que “vamos a tener que incrementar los pasajes para recuperar todo eso, los pasajes tendrían que subir en un 30%, si van a bajar un 30% (al crédito fiscal de la compra de carburantes), entonces vamos a tener que subir en un 30%”.
El ejecutivo añadió que el Sindicato de Transporte Interdepartamental e Internacional de Buses de la ciudad de La Paz evalúa la posibilidad de incrementar el precio de los pasajes.
Entretanto, otros sectores como el transporte pesado y los agricultores evalúan el impacto que puede tener en sus ingresos que las facturas por compra de combustibles sean válidas para un menor descargo impositivo.
La disposición transitoria tercera del proyecto de Ley de Presupuesto General del Estado de 2013 establece que “en la compra de gasolina especial, gasolina premium o diésel oil, las personas naturales o jurídicas computarán como crédito fiscal para la liquidación del Impuesto al Valor Agregado (IVA) sólo el 70% sobre el crédito fiscal del valor de la compra”.
El lunes, el presidente de la Confederación Nacional de Choferes de Bolivia, Franklin Durán, aseveró que “lamentablemente, en el transporte pesado y de pasajeros no tiene la posibilidad descargar (nuestros impuestos) con otras facturas. Si nos van a restringir esto es mejor que nos digan que ya no vale nada”.
Ayer, el ministro de Economía, Luis Arce, señaló que los combustibles no subieron de precio, por lo tanto los pasajes no deben elevarse. Afirmó que los choferes “son los más beneficiados con la subvención al diésel y a la gasolina, y son siempre los que no quieren pagar impuestos” .
El presidente de la Cámara de Transporte Pesado de El Alto, Gustavo Rivadeneira, afirmó que “de acuerdo a la Ley 843, sólo tenemos para nuestro descargo (de impuestos) la compra de repuestos, combustible y otros, pero ni siquiera eso alcanza para cubrir nuestros gastos y nos afecta la informalidad; por ejemplo, los talleres no nos dan facturas”.
La Asociación de Productores de Oleaginosas y Trigo (Anapo) -según su gerente, Rolando Zabala- analiza cuál será el impacto que tendrá esta medida en su sector, uno de los principales consumidores de diésel.