Dilma Rousseff arremete contra la austeridad y pide crecimiento en Europa
Cadiz, AFP
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, arremetió el sábado contra las políticas de austeridad para enfrentar la crisis y defendió la adopción de medidas de estímulo al crecimiento y la inclusión social en la XXII Cumbre Iberoamericana.
Rousseff sostuvo enfáticamente que Brasil "defiende que la consolidación fscal simultánea no es la mejor respuesta a la crisis mundial, ydad a la austeridad, añadió Rousseff, "aunque aleja el quiste de una quiebra financiera, no aleja la desconfianza de los mercados, y aún más importante, no aleja la desconfianza de las poblaciones".
Para hacer frente a la creciente insatisfacción social, agregó, es necesaria la adopción de una estrategia que "obtenga resultados concretos para las personas y presente un horizonte de esperanza, no apenas la perspectiva de más años de sufrimiento".
Además, la austeridad siquiera ha sido capaz de consolidar su objetivo principal, el equilibrio fiscal, afirmó. "En virtud del bajo crecimiento y del austero corte de gastos, asistimos ahora al crecimiento de los déficits fiscales y no su reducción, que a su vez conducen a la reducción del PIB", apuntó.
El impacto social de la crisis de la deuda europea se convirtió en el tema central en la Cumbre Iberoamericana de Cádiz, en un contexto generalizado de cuestionamiento a las medidas de austeridad como forma prioritaria para superación de la coyuntura.
La presidenta de Brasil, Dilma Rousseff, arremetió el sábado contra las políticas de austeridad para enfrentar la crisis y defendió la adopción de medidas de estímulo al crecimiento y la inclusión social en la XXII Cumbre Iberoamericana.
Rousseff sostuvo enfáticamente que Brasil "defiende que la consolidación fscal simultánea no es la mejor respuesta a la crisis mundial, ydad a la austeridad, añadió Rousseff, "aunque aleja el quiste de una quiebra financiera, no aleja la desconfianza de los mercados, y aún más importante, no aleja la desconfianza de las poblaciones".
Para hacer frente a la creciente insatisfacción social, agregó, es necesaria la adopción de una estrategia que "obtenga resultados concretos para las personas y presente un horizonte de esperanza, no apenas la perspectiva de más años de sufrimiento".
Además, la austeridad siquiera ha sido capaz de consolidar su objetivo principal, el equilibrio fiscal, afirmó. "En virtud del bajo crecimiento y del austero corte de gastos, asistimos ahora al crecimiento de los déficits fiscales y no su reducción, que a su vez conducen a la reducción del PIB", apuntó.
El impacto social de la crisis de la deuda europea se convirtió en el tema central en la Cumbre Iberoamericana de Cádiz, en un contexto generalizado de cuestionamiento a las medidas de austeridad como forma prioritaria para superación de la coyuntura.