Colombia sacó un gran empate ante Brasil
Nueva Jersey, EFE
La selección de Colombia le aguó la fiesta del milésimo partido a la de Brasil tras el empate 1-1 registrado en el estadio MetLife de Nueva Jersey, en el partido amistoso de la fecha FIFA en la que ambos equipos dieron un gran espectáculo futbolístico.
Aunque Brasil falló un penalti, injustamente marcado por el árbitro del encuentro, el estadounidense Matt Geiger, al minuto 80, cuando el delantero Neymar mandó a las nubes el balón, Colombia dio toda una lección de buen fútbol y la igualdad fue merecida.
El equipo colombiano fue el que abrió el marcador en el minuto 43 al culminar Juan Guillermo Cuadrado, el mejor hombre del partido, una gran jugada de James Rodríguez.
Brasil consiguió el empate en el 63 por intermedio de Neymar, que se aprovechó de la lentitud de Edwin Valencia y remató cruzado a media altura para batir al guardameta colombiano, David Ospina, de gran actuación.
El empate no hizo que el equipo colombiano se viniese abajo en su juego y, por el contrario, siguió siendo el dueño del balón en el centro del campo, donde también estuvo un hombre brillante, Macnelly Torres que junto a Cuadrado y Ospina fueron los más destacados.
Colombia tenía todo en su juego: brillantez, inteligencia, control y peligro, con los pases de Rodríguez, que al final no pudo encontrar a Radamel Falcao García, que luchó como siempre y tuvo dos buenos remates de cabeza en la segunda parte que llevaron el peligro de gol.
De esta manera, Brasil acabó encerrado en su área y no pudo celebrar su partido número mil con un triunfo porque delante tuvo a una Colombia que lo imitó en su juego y lo hizo mejor.
Aunque las oportunidades más claras de gol en la primera parte fueron de Brasil, cuando al minuto 17 Kaká disparó pegado al poste derecho y el balón salió ligeramente desviado.
Más clara fue la que tuvo Neymar a los 23 al rematar de cabeza solo en el área pequeña y la respuesta la dio Ospina, que se quedó quieto esperando la reacción del delantero brasileño y le rechazó de forma brillante el balón cuando ya se cantaba el gol.
Sería de nuevo Kaká, a los 31 minutos, el que rematase potente desde fuera del área y el balón se estrelló en el travesaño de la portería defendida por Ospina.
Luego llegaría la genialidad del gol de Colombia y la confirmación que su invicto en los últimos partidos no es ninguna casualidad sino que el equipo que dirige el argentino José Pekerman está con un nivel de juego brillante, competitivo, ganador y con una gran disciplina táctica.
Brasil intentó siempre hacer su mejor fútbol, pero la defensa de Colombia estuvo segura, con un Pablo Armero que no hizo ninguna concesión a Dani Alves, Valencia, en su función defensiva, seguro, Mario Alberto Yepes y Aquivaldo Mosquera, sobrios y sin ningún tipo de concesiones.
Mientras que en el centro del campo Torres dio toda una lección de buen fútbol, con clase, inteligencia, marcando los tiempos, Rodríguez puso la técnica y el toque preciso y Cuadrado fue el colombiano disfrazado de brasileño al completar un partido excepcional, quitándole todo el protagonismo a la gran figura de Brasil, Neymar, que además falló el penalti.
Brasil superó su primera prueba después del fracaso de los Juegos Olímpicos, y el entrenador Mano Menezes, que salió con el clásico 4-3-3, tiene todavía mucho trabajo que realizar en busca de la continuidad y definición del equipo titular que presentará para la Copa Confederaciones, de la que serán anfitriones como del Mundial del 2014.
La Canarinha dejó atrás el amargo recuerdo de su último partido en el estadio MetLife de Nueva Jersey, en el que Argentina le ganó por 4-3, pero no pudo celebrar su partido 1.000 con un triunfo.
Mientras que Colombia elevó aun más toda la ilusión justificada que tiene de volver a un Mundial, algo que no consiguen desde el de Francia 98.