China anuncia normas anticorrupción para ejecutivos de firmas estatales
Pekin, Reuters
China prohibirá a los ejecutivos de los bancos y las compañías financieras estatales comprar lujosos automóviles y casas, dijo la agencia estatal de noticias Xinhua, en el último esfuerzo de Pekín por combatir la corrupción y el despilfarro en los funcionarios públicos.
El conjunto de 12 normas emitidas por el Ministerio de Finanzas, el Ministerio de Supervisión y la Oficina Nacional de Auditoría llega luego de que jefe del Partido Comunista, Xi Jinping, advirtiera que se podría producir incluso la caída del Gobierno si se permite que la corrupción aumente.
China está sensible a todo lo que levante sospechas de corrupción, sobre todo después de que el escándalo que involucró a Bo Xilai, un ex político de alto rango, y su esposa Gu Kailai opacó el período previo a la transición de líderes en la segunda mayor economía del mundo, realizada la semana pasada.
Bo fue expulsado del partido este año y enfrenta posibles cargos de corrupción y abuso de poder, mientras que su esposa fue encarcelada por su implicación en el asesinato de un empresario británico.
Las nuevas normas, que entrarán en vigor en diciembre, establecen que los representantes de los bancos estatales o de las instituciones financieras que pertenecen al gobierno central deben acatar las pautas de gastos en vehículos, dijo Xinhua.
Muchos ejecutivos bancarios chinos suelen utilizar automóviles de lujo para uso oficial y privado.
Las reglas también prohíben a estos ejecutivos "utilizar fondos públicos para comprar residencias o realizar remodelaciones en sus viviendas", dijo Xinhua.
El Gobierno dijo también que los ejecutivos de estas empresas no podrán violar las directrices sobre el uso de fondos públicos, agregó la agencia estatal.
China anteriormente impuso normas a sus funcionarios, que entraron en vigor el 1 de octubre, que les impedían gastar dinero público en banquetes suntuosos o vehículos de lujo, y también aceptar regalos caros.
Una serie de incidentes de alto perfil -entre ellos un choque a alta velocidad de un Ferrari que presuntamente involucró al hijo de un alto funcionario público- han enfurecido a muchos chinos, que han expresado su malestar a través de internet.
China prohibirá a los ejecutivos de los bancos y las compañías financieras estatales comprar lujosos automóviles y casas, dijo la agencia estatal de noticias Xinhua, en el último esfuerzo de Pekín por combatir la corrupción y el despilfarro en los funcionarios públicos.
El conjunto de 12 normas emitidas por el Ministerio de Finanzas, el Ministerio de Supervisión y la Oficina Nacional de Auditoría llega luego de que jefe del Partido Comunista, Xi Jinping, advirtiera que se podría producir incluso la caída del Gobierno si se permite que la corrupción aumente.
China está sensible a todo lo que levante sospechas de corrupción, sobre todo después de que el escándalo que involucró a Bo Xilai, un ex político de alto rango, y su esposa Gu Kailai opacó el período previo a la transición de líderes en la segunda mayor economía del mundo, realizada la semana pasada.
Bo fue expulsado del partido este año y enfrenta posibles cargos de corrupción y abuso de poder, mientras que su esposa fue encarcelada por su implicación en el asesinato de un empresario británico.
Las nuevas normas, que entrarán en vigor en diciembre, establecen que los representantes de los bancos estatales o de las instituciones financieras que pertenecen al gobierno central deben acatar las pautas de gastos en vehículos, dijo Xinhua.
Muchos ejecutivos bancarios chinos suelen utilizar automóviles de lujo para uso oficial y privado.
Las reglas también prohíben a estos ejecutivos "utilizar fondos públicos para comprar residencias o realizar remodelaciones en sus viviendas", dijo Xinhua.
El Gobierno dijo también que los ejecutivos de estas empresas no podrán violar las directrices sobre el uso de fondos públicos, agregó la agencia estatal.
China anteriormente impuso normas a sus funcionarios, que entraron en vigor el 1 de octubre, que les impedían gastar dinero público en banquetes suntuosos o vehículos de lujo, y también aceptar regalos caros.
Una serie de incidentes de alto perfil -entre ellos un choque a alta velocidad de un Ferrari que presuntamente involucró al hijo de un alto funcionario público- han enfurecido a muchos chinos, que han expresado su malestar a través de internet.