Septiembre fue el mes más mortífero en Irak en los últimos dos años
Septiembre fue el mes más mortífero en Irak en los últimos dos años, con un saldo de 365 muertos, en un país sumido en una crisis política a la cual se agregan graves deficiencias en la gestión de la seguridad.
Según cifras comunicadas este lunes por los ministerios de Salud y del Interior, 182 civiles, 88 policías y 95 soldados, murieron en septiembre, y 683 personas resultaron heridas -453 civiles, 110 policías y 120 soldados-, víctimas de la violencia que sacude al país. Se trata de las peores cifras desde agosto de 2010, año en el que 426 personas murieron en atentados, ataques y asesinatos.
Estas cifras son una muestra de la inestabilidad que persiste en Irak, meses antes del 10º aniversario de la invasión estadounidense, en marzo de 2010.
El domingo, 33 personas murieron durante una ola de violencia que estalló en el país, según fuentes médicas y de seguridad.
El ocho y nueve de septiembre, el país vivió dos días trágicos: unos treinta ataques coordinados mataron a cerca de 90 personas.
El Estado Islámico de Irak, un grupo vinculado a la red Al Qaida en el país, reivindicó esta ola de atentados en respuesta a una "nueva campaña" anunciada en julio.
Hoy, un atentado con coche bomba, dirigido contra un general del ministerio del Interior, causó la muerte a un civil y dejó cuatro heridos en Bagdad.
Según Ali Haideri, especialista iraquí de seguridad, entrevistado por la AFP, el recrudecimiento de la violencia se explica por "la falta de equipo de las fuerzas de seguridad" y "las fallas del servicio de inteligencia".
