Primer bombardeo aéreo de Damasco, asesinado un general del régimen sirio
Damasco, AFP
Damasco fue bombardeada el martes, por primera vez desde el inicio del conflicto hace 19 meses, en un ataque aéreo contra un barrio rebelde de la capital donde la violencia se intensificó, con el asesinato de un general del ejército aéreo.
Ante la degradación de la situación, el emisario internacional de la ONU y de la Liga Árabe, Lakhdar Brahimi, viajaba el martes a China, tras haber visitado Rusia, los dos países miembros del Consejo de Seguridad aliados del régimen de Bashar al Asad.
El ministro turco de Relaciones Exteriores, Ahmet Davutgolu, rechazó el llamamiento de su homólogo ruso, Serguei Lavrov, a los países de la región a abrir un diálogo con el presidente Asad. Catar, uno de los proveedores en armas de los insurgentes, acusó al régimen sirio de llevar a cabo una "guerra de exterminio" en contra de su pueblo.
"Por primera vez, la capital ha sido objetivo de un caza-bombardero que lanzó el martes por la tarde cuatro bombas contra el barrio de Jobar, en el este de Damasco", indicó el Observatorio Siro de Derechos Humanos (OSDH).
Esta organización, basada en Gran Bretaña, recoge su información de una red de militantes y de fuentes médicas en los hospitales civiles y militares del país.
El ruido, aterrador, se oyó en toda la ciudad, según un periodista de la AFP en Damasco.
Hasta ahora, el régimen solo utilizaba helicópteros para ametrallar algunos barrios de la capital.
Los rebeldes reivindican el asesinato de un general
Los aparatos militares también bombardearon Duma, una localidad rebelde en el norte de la capital, un ataque que dejó al menos 18 muertos, incluidos cinco niños y cuatro mujeres, según el director del OSDH.
Otro ataque aéreo contra Maaret al Numan, una ciudad estratégica en la carretera entre Damasco y Alepo, mató a cuatro niños y a tres civiles.
En momentos en que los helicópteros y caza-bombarderos se han convertido en la principal arma del régimen, el general Abdalá Mahmud al Jalidi, miembro del mando del ejército, fue asesinado en el norte de Damasco.
El hombre, "uno de los mejores expertos en materia de aviación militar en Siria", según el canal de televisión oficial sirio, murió el lunes tiroteado por "terroristas", según la agencia oficial Sana. Damasco tilda de "terroristas" a los opositores rebeldes que combaten contra el régimen.
El Ejército Sirio Libre (ESL) reivindicó en un comunicado colgado en Facebook el asesinato de este general "quien estaba encargado de los entrenamientos en la fuerza aérea", al igual que el del sarjento-jefe de los temidos servicios de inteligencia del ejército del aire.
Este asesinato ocurrió el día en que la aviación siria llevó a cabo los bombardeos más violentos desde su entrada en acción el verano pasado, con más de 60 ataques durante el día del lunes.
Guerra civil o de exterminio
También en Damasco, se registraron el martes enfrentamientos entre los insurgentes sirios y combatientes palestinos apoyados por las tropas del régimen en Yarmuk, un campo de refugiados en el sur de la capital, en el que viven unos 148.500 palestinos, indicaron una ONG y militantes anti-Asad.
Los enfrentamientos opusieron hasta la madrugada a insurgentes con los combatientes palestinos del Frente Popular para la Liberación de Palestina-Comando General (FPLP-CG) de Ahmad Jibril, partidario del régimen de Bashar al Asad. Según los militantes, el ejército sirio vino a ayudar al FPLP-CG.
Siria cuenta con unos 510.000 refugiados registrados por la UNRWA, la agencia de Naciones Unidas encargada de los refugiados palestinos.
En el resto del país, el ejército y los rebeldes se enfrentaban en un barrio de Homs y de Rastan, una localidad cercana, asediada desde hace meses por las tropas de Asad, al igual que en Alepo, la metrópolis del norte, en la que los insurgentes atacaron en tres frentes en el norte del país.
Los combates y episodios violentos mataron el martes al menos a 123 personas en el país, según un balance provisional del OSDH.
El lunes, el mediador de la ONU y de la Liga Árabe admitió que la situación empeoraba y que "si no es una guerra civil, no sé qué es".
El primer ministro de Catar, el jeque Hamad bin Jasem al Thani, estimó que Siria sufría una "guerra de exterminio" de la que acusó de complicidad a la comunidad internacional, paralizada por las divisiones.
En Pekín y Moscú, Brahimi debía tratar de nuevo de convencer a los dirigentes de abandonar su oposición a una acción del Consejo de Seguridad de la ONU.
Damasco criticó duramente la negativa a dialogar del gobierno turco y estimó que Turquía y los países del Golfo son responsables de que siga el conflicto, "al financiar, proporcionar armas y albergar a grupos armados", según el portavoz sirio de Exteriores, Jihad Makdissi.
Damasco fue bombardeada el martes, por primera vez desde el inicio del conflicto hace 19 meses, en un ataque aéreo contra un barrio rebelde de la capital donde la violencia se intensificó, con el asesinato de un general del ejército aéreo.
El general del ejército sirio del aire Abdallah Mahmud al Khalidi fue asesinado en el norte de Damasco, anunció la televisión pública siria sin precisar las circunstancias.
El primer ministro de Catar, Hamad Ben Jassem Al Thani, considera que el conflicto en Siria no es una guerra civil, sino una "guerra de exterminio" contra el pueblo sirio con la complicidad de la comunidad internacional.