Policías y manifestantes se enfrentan en Atenas
Grecia, AFP
La policía griega antimotines arrojó el jueves bombas de gas lacrimógeno contra participantes de una enorme manifestación en el centro de Atenas, en medio de una huelga general en el país, constató un periodista de la AFP.
Los manifestantes habían roto un cordón policial en las proximidades de la Plaza Syntagma, en el centro de la capital griega, pero fueron rechazados por los agentes. Alrededor de 25.000 personas participan en las manifestaciones.
Es que Grecia volvía a registrar una disminución de su actividad tras el llamado a la huelga general lanzada por los sindicatos, la cuarta en lo que va del año, para protestar contra la austeridad, el mismo día en que se reúnen en Bruselas los dirigentes europeos, miembros de la troika de socios capitalistas de Grecia.
Los servicios públicos y los transportes se están viendo fuertemente afectados, con los trenes y los transbordadores suprimidos y los vuelos anulados. Los dos principales sindicatos GSEE y Adedy deseaban enviar el mensaje de que un tercer año consecutivo de recortes presupuestarios masivos no podrá ser soportado por los griegos, mientras el país se hunde en la recesión-depresión.
Por su parte, el gobierno de coalición, dirigido por el primer ministro conservador Antonis Samaras, continúa discutiendo con la troika (integrada por la Unión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional) sobre los últimos detalles del programa de ajuste económico, que pasa por nuevos recortes presupuestarios, que se pondrá en marcha a cambio de un préstamo de 31.500 millones de euros.
La cumbre en Bruselas. Los dirigentes europeos están reunidos para corregir el desequilibrio entre el norte y sur europeo, en medio de protestas contra la austeridad en Grecia y negociaciones "que evolucionan" hacia un rescate en España. Pocas horas antes de que los jefes de Estado y de gobierno de los 27 países de la zona euro comenzaran los debates, la canciller alemana, Angela Merkel, echó leña al fuego al pedir que Bruselas tenga "un verdadero derecho de injerencia en los presupuestos nacionales cuando los países no respeten los límites fijados por la estabilidad y el crecimiento".
La canciller alemana defendió la idea de aumentar las competencias del comisario europeo de Asuntos Económicos para que pueda vetar los presupuestos nacionales de los Estados miembros, al hablar ante el Parlamento de su país.
La policía griega antimotines arrojó el jueves bombas de gas lacrimógeno contra participantes de una enorme manifestación en el centro de Atenas, en medio de una huelga general en el país, constató un periodista de la AFP.
Los manifestantes habían roto un cordón policial en las proximidades de la Plaza Syntagma, en el centro de la capital griega, pero fueron rechazados por los agentes. Alrededor de 25.000 personas participan en las manifestaciones.
Es que Grecia volvía a registrar una disminución de su actividad tras el llamado a la huelga general lanzada por los sindicatos, la cuarta en lo que va del año, para protestar contra la austeridad, el mismo día en que se reúnen en Bruselas los dirigentes europeos, miembros de la troika de socios capitalistas de Grecia.
Los servicios públicos y los transportes se están viendo fuertemente afectados, con los trenes y los transbordadores suprimidos y los vuelos anulados. Los dos principales sindicatos GSEE y Adedy deseaban enviar el mensaje de que un tercer año consecutivo de recortes presupuestarios masivos no podrá ser soportado por los griegos, mientras el país se hunde en la recesión-depresión.
Por su parte, el gobierno de coalición, dirigido por el primer ministro conservador Antonis Samaras, continúa discutiendo con la troika (integrada por la Unión Europea, el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional) sobre los últimos detalles del programa de ajuste económico, que pasa por nuevos recortes presupuestarios, que se pondrá en marcha a cambio de un préstamo de 31.500 millones de euros.
La cumbre en Bruselas. Los dirigentes europeos están reunidos para corregir el desequilibrio entre el norte y sur europeo, en medio de protestas contra la austeridad en Grecia y negociaciones "que evolucionan" hacia un rescate en España. Pocas horas antes de que los jefes de Estado y de gobierno de los 27 países de la zona euro comenzaran los debates, la canciller alemana, Angela Merkel, echó leña al fuego al pedir que Bruselas tenga "un verdadero derecho de injerencia en los presupuestos nacionales cuando los países no respeten los límites fijados por la estabilidad y el crecimiento".
La canciller alemana defendió la idea de aumentar las competencias del comisario europeo de Asuntos Económicos para que pueda vetar los presupuestos nacionales de los Estados miembros, al hablar ante el Parlamento de su país.