Ejército libanés dice que está decidido a restablecer el orden y la paz civil
Libia, AFP
El ejército libanés manifestó el lunes que está decidido a restablecer el orden y la paz civil después de los enfrentamientos registrados en Beirut.
"El ejército tomará medidas enérgicas sobre todo en las regiones donde hay enfrentamientos confesionales, para impedir que el Líbano se transforme de nuevo en un campo de batalla para solucionar diferendos regionales", expresó el ejército en un comunicado este lunes.
Este mismo día hubo tiroteos en un barrio sunita de Beirut entre militares y hombres armados, haciendo temer un caos en el Líbano, cuyo jefe de la oposición Said Hariri ha mostrado su determinación de derrocar el gobierno de su rival Najib Mikati.
Temiendo una situación de caos, los embajadores de los cinco miembros permanentes del Consejo de seguridad llamaron a "la unidad nacional". El Líbano es un país multiconfesional donde cristianos, sunitas y chiitas representan cada cual un tercio de la población.
Si la mayoría de los sunitas es hostil al régimen sirio de Bashar al Asad, por el contrario, la mayoría de los sunitas lo apoya. La comunidad cristiana aparece dividida.
Por otra parte, el ejército pidió a los dirigentes políticos libaneses "ser cincunspectos en la expresión de sus posiciones y de sus ideas (...) pues el destino del país están en juego".
El domingo, los funerales de uno de los jefes de la seguridad libanesa, un sunita allegado a Saad Hariri y enemigo jurado del gobierno sirio, degeneró en manifestación violenta contra el primer ministro Mitaki, después de que un dirigente de la corriente de Hariri pronunciara un encendido discurso, acusándolo de cubrir este "crimen".
El ejército libanés manifestó el lunes que está decidido a restablecer el orden y la paz civil después de los enfrentamientos registrados en Beirut.
"El ejército tomará medidas enérgicas sobre todo en las regiones donde hay enfrentamientos confesionales, para impedir que el Líbano se transforme de nuevo en un campo de batalla para solucionar diferendos regionales", expresó el ejército en un comunicado este lunes.
Este mismo día hubo tiroteos en un barrio sunita de Beirut entre militares y hombres armados, haciendo temer un caos en el Líbano, cuyo jefe de la oposición Said Hariri ha mostrado su determinación de derrocar el gobierno de su rival Najib Mikati.
Temiendo una situación de caos, los embajadores de los cinco miembros permanentes del Consejo de seguridad llamaron a "la unidad nacional". El Líbano es un país multiconfesional donde cristianos, sunitas y chiitas representan cada cual un tercio de la población.
Si la mayoría de los sunitas es hostil al régimen sirio de Bashar al Asad, por el contrario, la mayoría de los sunitas lo apoya. La comunidad cristiana aparece dividida.
Por otra parte, el ejército pidió a los dirigentes políticos libaneses "ser cincunspectos en la expresión de sus posiciones y de sus ideas (...) pues el destino del país están en juego".
El domingo, los funerales de uno de los jefes de la seguridad libanesa, un sunita allegado a Saad Hariri y enemigo jurado del gobierno sirio, degeneró en manifestación violenta contra el primer ministro Mitaki, después de que un dirigente de la corriente de Hariri pronunciara un encendido discurso, acusándolo de cubrir este "crimen".