Violentos combates en Alepo e Irán propone observadores
Alepo, AFP
Violentos combates estallaron el martes en la madrugada en los barrios rebeldes de Alepo, según habitantes de esta ciudad del norte de Siria, en tanto Irán, aliado del régimen de Damasco, propuso enviar observadores para tratar de detener la violencia.
De momento y por las profundas divergencias internacionales no se vislumbra ninguna salida al conflicto que el sábado entró en su 19º mes. Más de 27.000 personas murieron desde marzo de 2011, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) y decenas de miles de otros huyeron hacia los países vecinos.
El emisario de la ONU y de la Liga Árabe, Lajdar Brahimi, que viajó a Siria la semana pasada para reunirse con el presidente Bashar al Asad, visitó el martes por la tarde el campo de refugiados de Zaatari (de 30.000 personas), en el norte de Jordania, en donde unas 200 personas lanzaron piedras a su convoy cuando partía.
"¡Brahimi, vete de aquí!", gritaron. El mediador había afirmado poco antes que la situación se agravaba en Siria.
"Dijeron que estaban enojados porque se reunió con Bashar al Asad e intentó 'darle más posibilidades para matar a más gente', según ellos", declaró a la AFP un responsable de seguridad.
El emisario había visitado antes el campamento de Altinözü, en la provincia turca de Hatay y en donde viven unos 1.300 sirios.
Brahimi terminó recientemente una visita de cuatro días a Damasco, durante la cual se entrevistó con responsables sirios y con jefes de la rebelión, pero la oposición ya estimó que la continuación de la violencia y el bloqueo en el Consejo de Seguridad de la ONU hacían que la misión estaba destinada a fracasar.
En el terreno hubo enfrentamientos en varios barrios de Alepo, en donde el ejército y los rebeldes se enfrentan desde hace más de dos meses, según una periodista de la AFP en el lugar y habitantes de la zona.
La periodista vio una pareja y sus tres hijos llegar al hospital de Shaar, en el este de la ciudad. El padre sacó a un bebe del vehículo, herido en la cabeza y con el rostro ensangrentado.
Los enfrentamiento estallaron en varios barrios en donde están atrincherados los rebeldes: Bustan al Kasr (suroeste), el sector cercano a Izaa, Sukari (sur) y sobre todo el barrio de Sajur (este).
El régimen afirmó que sus tropas controlaban el barrio estratégico de Midan (centro), luego de una semana de encarnizados combates.
"Cuando el ejército dice controlar un sector, sólo es temporalmente (...) pues de nuevo se producen enfrentamientos con la guerrilla, lo que no es un verdadero avance", dijo Rami Abdel Rahman, presidente del opositor OSDH.
Al norte de Alepo se registraban por la tarde intensos combates entre el ejército y los rebeldes que intentaban tomar el control del puesto fronterizo con Turquía de Tall al Abyad, informó la agencia de prensa turca Anatolia.
En Damasco, cuatro soldados murieron en combates en la periferia de dos barrios.
En total 86 personas murieron este martes, de las cuales 65 civiles, según un balance provisorio del OSDH. Estas cifras son imposibles de verificar por una fuente independiente.
En una reunión este lunes por la noche en El Cairo del "grupo de contacto" cuatripartito sobre Siria (Irán, Egipto, Turquía y Arabia Saudita), Teherán propuso el envío de observadores de los cuatro países, a pesar del fracaso de misiones similares comisionadas por la Liga Árabe y luego por la ONU.
El ministro iraní de Relaciones Exteriores, Alí Akbar Salehi, llamó a "un cese simultáneo de las violencias por las partes en presencia, a un arreglo pacífico sin intervención extranjera y a un cese de la ayuda financiera y militar a la oposición siria", según la agencia IRNA.
Paralelamente, su ministerio desmintió el envío a Siria de Guardianes de la revolución (Pasdaran), la fuerza de elite del régimen iraní, luego de declaraciones del comandante en jefe de los Pasdaram que evocó una misión de consejo en Siria y el Líbano vecinos.
En visita al Cairo, el ministro francés de Relaciones Exteriores, Laurent Fabius, afirmó que el conflicto sirio no debía propagarse en el Líbano vecino, advirtiendo contra las "consecuencias internacionales" de la crisis.
Fuentes diplomáticas europeas indicaron además que el jefe de la diplomacia rusa, Serguei Lavrov, debería participar en "discusiones serias" sobre Siria con sus homólogos europeos la víspera de su próxima reunión en Luxemburgo en octubre.
En esa ocasión, la Unión Europea planea reforzar sus sanciones contra el régimen de Bashar al Asad, cuando Moscú, fiel aliado del régimen sirio, bloquea la adopción de medidas similares en la ONU desde que comenzó la crisis.
En tanto, Irak reabrió uno de sus principales puntos de paso con Siria, el de Qaim, cerrado desde el 15 de agosto.
Unos refugiados sirios corren mientras el enviado de Naciones Unidas Lajdar Brahimi llegaba este martes 18 de septiembre al campamento de Zaatri, cerca de la ciudad jordana de Mafraq, donde viven 30.000 personas.
Unos rebeldes sirios ayudan a tumbar en una camilla a un camarada herido en los enfrentamientos con el ejército este martes 18 de septiembre fuera de un hospital en Alepo, en el norte del país.
Panorama de la violencia en Siria este martes 18 de septiembre, cuando continuaban los violentos combates en Alepo, mientras Irán proponía observadores.
Violentos combates estallaron el martes en la madrugada en los barrios rebeldes de Alepo, según habitantes de esta ciudad del norte de Siria, en tanto Irán, aliado del régimen de Damasco, propuso enviar observadores para tratar de detener la violencia.
De momento y por las profundas divergencias internacionales no se vislumbra ninguna salida al conflicto que el sábado entró en su 19º mes. Más de 27.000 personas murieron desde marzo de 2011, según el Observatorio Sirio de Derechos Humanos (OSDH) y decenas de miles de otros huyeron hacia los países vecinos.
El emisario de la ONU y de la Liga Árabe, Lajdar Brahimi, que viajó a Siria la semana pasada para reunirse con el presidente Bashar al Asad, visitó el martes por la tarde el campo de refugiados de Zaatari (de 30.000 personas), en el norte de Jordania, en donde unas 200 personas lanzaron piedras a su convoy cuando partía.
"¡Brahimi, vete de aquí!", gritaron. El mediador había afirmado poco antes que la situación se agravaba en Siria.
"Dijeron que estaban enojados porque se reunió con Bashar al Asad e intentó 'darle más posibilidades para matar a más gente', según ellos", declaró a la AFP un responsable de seguridad.
El emisario había visitado antes el campamento de Altinözü, en la provincia turca de Hatay y en donde viven unos 1.300 sirios.
Brahimi terminó recientemente una visita de cuatro días a Damasco, durante la cual se entrevistó con responsables sirios y con jefes de la rebelión, pero la oposición ya estimó que la continuación de la violencia y el bloqueo en el Consejo de Seguridad de la ONU hacían que la misión estaba destinada a fracasar.
En el terreno hubo enfrentamientos en varios barrios de Alepo, en donde el ejército y los rebeldes se enfrentan desde hace más de dos meses, según una periodista de la AFP en el lugar y habitantes de la zona.
La periodista vio una pareja y sus tres hijos llegar al hospital de Shaar, en el este de la ciudad. El padre sacó a un bebe del vehículo, herido en la cabeza y con el rostro ensangrentado.
Los enfrentamiento estallaron en varios barrios en donde están atrincherados los rebeldes: Bustan al Kasr (suroeste), el sector cercano a Izaa, Sukari (sur) y sobre todo el barrio de Sajur (este).
El régimen afirmó que sus tropas controlaban el barrio estratégico de Midan (centro), luego de una semana de encarnizados combates.
"Cuando el ejército dice controlar un sector, sólo es temporalmente (...) pues de nuevo se producen enfrentamientos con la guerrilla, lo que no es un verdadero avance", dijo Rami Abdel Rahman, presidente del opositor OSDH.
Al norte de Alepo se registraban por la tarde intensos combates entre el ejército y los rebeldes que intentaban tomar el control del puesto fronterizo con Turquía de Tall al Abyad, informó la agencia de prensa turca Anatolia.
En Damasco, cuatro soldados murieron en combates en la periferia de dos barrios.
En total 86 personas murieron este martes, de las cuales 65 civiles, según un balance provisorio del OSDH. Estas cifras son imposibles de verificar por una fuente independiente.
En una reunión este lunes por la noche en El Cairo del "grupo de contacto" cuatripartito sobre Siria (Irán, Egipto, Turquía y Arabia Saudita), Teherán propuso el envío de observadores de los cuatro países, a pesar del fracaso de misiones similares comisionadas por la Liga Árabe y luego por la ONU.
El ministro iraní de Relaciones Exteriores, Alí Akbar Salehi, llamó a "un cese simultáneo de las violencias por las partes en presencia, a un arreglo pacífico sin intervención extranjera y a un cese de la ayuda financiera y militar a la oposición siria", según la agencia IRNA.
Paralelamente, su ministerio desmintió el envío a Siria de Guardianes de la revolución (Pasdaran), la fuerza de elite del régimen iraní, luego de declaraciones del comandante en jefe de los Pasdaram que evocó una misión de consejo en Siria y el Líbano vecinos.
En visita al Cairo, el ministro francés de Relaciones Exteriores, Laurent Fabius, afirmó que el conflicto sirio no debía propagarse en el Líbano vecino, advirtiendo contra las "consecuencias internacionales" de la crisis.
Fuentes diplomáticas europeas indicaron además que el jefe de la diplomacia rusa, Serguei Lavrov, debería participar en "discusiones serias" sobre Siria con sus homólogos europeos la víspera de su próxima reunión en Luxemburgo en octubre.
En esa ocasión, la Unión Europea planea reforzar sus sanciones contra el régimen de Bashar al Asad, cuando Moscú, fiel aliado del régimen sirio, bloquea la adopción de medidas similares en la ONU desde que comenzó la crisis.
En tanto, Irak reabrió uno de sus principales puntos de paso con Siria, el de Qaim, cerrado desde el 15 de agosto.
Unos refugiados sirios corren mientras el enviado de Naciones Unidas Lajdar Brahimi llegaba este martes 18 de septiembre al campamento de Zaatri, cerca de la ciudad jordana de Mafraq, donde viven 30.000 personas.
Unos rebeldes sirios ayudan a tumbar en una camilla a un camarada herido en los enfrentamientos con el ejército este martes 18 de septiembre fuera de un hospital en Alepo, en el norte del país.
Panorama de la violencia en Siria este martes 18 de septiembre, cuando continuaban los violentos combates en Alepo, mientras Irán proponía observadores.